El Mónaco está fuera este año de la lucha por la Ligue 1, pero alimentó este miércoles su gran sueño europeo con un 1-3 contra el Arsenal, que deja al equipo del Principado muy cerca de los cuartos de la Champions. Era una cita de Arsène Wenger, técnico de los 'gunners', con el pasado, ya que dirigió al Mónaco entre 1987 y 1994, y su Arsenal recibió un auténtico 'baño' ante su ex club. Los londinenses necesitarán una gesta en el Louis II para superar la eliminatoria en el partido de vuelta. Algo que no ha conseguido en los últimos cuatro años.