Tras los actos de violencia que se presentaron durante el partido entre Panathinaikos y Olympiakos en el futbol griego, las autoridades de la liga dieron a conocer que el Panathinaikos fue sancionado con la pérdida de tres puntos en el campeonato doméstico, además de una multa que asciende a los 100.000 euros y que los dos próximos partidos en casa sean a puerta cerrada.

El clásico helénico estuvo marcado por muchos incidentes, primeramente porque desde la grada fue lanzada una botella de vidrio en contra del mediocampista Kasami, hecho por el cual el silbante decidió retrasar el encuentro unos minutos. La situación se complico más cuando los aficionados del Panathinaikos lanzaron bengalas y saltaron al terreno de juego luego de que el estratega del Olympiakos Vitor Pereira los provocara con algunos gestos.

El Gobierno de Atenas anunció el miércoles la suspensión del campeonato local por tercera vez esta temporada y las medidas que se tomarían para erradicar la violencia, ya que este enfrentamiento dejó dos seguidores heridos y daños importantes del inmueble, sin embargo, esta no es la primera vez que se presentan estos incidentes, anteriormente habían ocurrido en noviembre cuando un árbitro fue atacado y hospitalizado.