El mediocampista brasileño, exChelsea, se volvió loco tras la derrota de su equipo Jiangsu Suning por 2-1 ante Shandong Luneng e intentó golpear al árbitro. 

Shandong Luneng superó este sábado a Jiangsu Suning por 2-1 en el marco de la 16° fecha de la Super Liga China, partido que se disputó en el Jinan Olympic Sports Center Stadium.

Al finalizar el encuentro, Ramires encabezó las protestas del equipo derrotado ante el árbitro Zhang Long, quien le mostró la tarjeta roja al brasileño. Ésto no hizo más que enloquecer aún más al carioca, quien salió disparado a increpar al referí, pero sus compañeros lo detuvieron antes de que la situación pasara a mayores.