Cuando estamos en el trabajo y hacemos las cosas bajo presión, nuestros niveles de estrés aumentan de manera significativa. Si sientes que ya no tienes control de tus emociones y te sientes abrumado, esta es una gran oportunidad para seguir una técnica súper práctica y sentirte mucho mejor.
Reconocer los signos.
El primer paso de este método es darse cuenta estás abrumado y necesitas hacer una pausa.
Hacer una pausa y observar
Deja de moverte y analiza la situación. Quédate quieto, respira, siente el estrés en tu cuerpo y observa cómo tu energía va de la cabeza hacia tus extremidades.
Nota la necesidad de estar en control
La sensación de agobio es tan fuerte porque sientes que nada está controlado. Pero si lo piensas bien, nunca estamos en control total, sólo necesitas reconocerlo.
Limitar tu alcance
No puedes hacer todo a la vez. Tampoco puedes hacer en un solo día las mil y un cosas que sabes que debes hacer. Haz una lista, elige un par de cosas y llévalas a cabo. Si la lista es muy larga, renegocia tus compromisos y reconocer que tienes una capacidad limitada.
Concéntrate en una cosa
Solamente puedes hacer una cosa en este momento. Concéntrate en esa cosa y dedícale tiempo.
Trata de relajarte
Si estás pensando constantemente en que las cosas no te saldrán como lo deseas, no avanzarás nada. Trata de encontrarle lo bonito al asunto y disfruta de cada una de tus actividades.