Las críticas surgieron tras darse a conocer que por cada teléfono celular otorgado a personas de escasos recursos mediante el programa Lifeline del gobierno de EU, la empresa controlada por Carlos Slim, tiene una ganancia de 10 dolares.
Sin embargo, el programa Lifeline no fue creado por Obama, sino por el presidente Ronald Reagan, en 1984. Este mismo programa de asistencia fue extendido a teléfonos celulares en 1996.
Inclusive, un video llamado “La señora del Obamaphone” fue difundido en sitios derechistas para criticar este programa. En este se muestra a una mujer perteneciente a una minoría diciendo que votará por Obama porque le dio un teléfono celular gratis.
"Voten por Obama porque nos regala teléfonos celulares"
Las críticas contra Slim recaen en que el hombre más rico del mundo, un mexicano, lucre con un programa hecho para ayudar a los pobres de Estados Unidos, lo cual parece molestar a ciertos sectores de medios de la derecha norteamericana.