El asesinato en

masa ocurrido ayer en Tucson, Arizona, es una muestra de lo que puede ocurrir

cuando el ambiente político se crispa al máximo gracias al constante bombardeo

de una campaña de odio que basa su ideología en el discurso de "ellos contra

nosotros".

Arizona, la

tierra del grupo armado antiinmigrante y racista de los "Minutemen", de una ley

antiinmigrante que tiene ecos del apartheid y cuna de movimientos neo-nazis y

de grupos ultraderechistas azuzados por orates como Glenn Beck que se agrupan

bajo la bandera del "Partido del Té", fue el lugar en donde ocurrió el primer

atentado político de gravedad en los Estados Unidos desde el atentado contra

Reagan en los ochenta. Esto no es ninguna sorpresa, más bien se trata de una

ley de simple causa y efecto.

Aunque Jared Lee

Loughner, el tipo de 22 años que asesinó a seis personas, incluyendo varios

adultos mayores y una niña de apenas 9 años de edad, no estaba en sus cabales,

su discurso plasmado en videos de Youtube apesta a la retórica del Partido del

Té y la paranoia contra las autoridades, el "Gran Gobierno" y las autoridades

financieras. Tal parece que años de azuzar a sectores radicales de derechas en

los EU mediante radio AM y FOX News por fin han rendido su sangriento fruto.

Lo más

preocupante es la posibilidad es que durante las campañas presidenciales rumbo

al 2012 en México se repita el escenario del 2006: que la derecha mexicana (Salinas

y el PAN) decidan volver a contratar siniestros publicistas extranjeros como

Dick Morris y Antonio Sola y que la campaña de odio se recrudezca más aún de la

mano de merolicos rabiosos como Pedro Ferriz de Con y Óscar Mario Beteta.

Si piensan que la

posibilidad de un atentado político en México es remota, simplemente analicen

las declaraciones hechas por Calderón hace apenas unos días, en donde vuelve a

llamar "violenta"

a la izquierda luego de que se viniera abajo la posibilidad de que el PRD y

el PAN fueran en alianza en el Estado de México.

Revivir el

discurso de "los pacíficos y los violentos" rumbo al 2012 puede desembocar en

una tragedia. Hace falta solo un tipo lleno de odio, o desequilibrado como

Jared Lee Loughner para que las cosas terminen en una tragedia. Y si eso pasa,

personas como Calderón, Sola, Ferriz de Con y demás serán responsables por

haber ayudado a difundir mensajes de odio desde el 2005.