El ciudadano Felipe Calderón declaró en entrevista para CNN que "es un debate muy difícil" la legalización de las drogas porque "si Estados Unidos no legaliza o incluso no plantea ese tipo de debate, no tiene sentido que nosotros lo hagamos". El usurpador manifestó su desacuerdo con la legalización y dijo que su principal propósito no era erradicar las drogas o el consumo sino cumplir la ley.

Se nota que Calderón no tiene ni la más mínima idea de que lo que está diciendo. Los estadounidenses sí llevando a cabo ese debate, exacerbado por la crisis económica y la posibilidad de que la violencia en México cruce la frontera. 14 estados han autorizado el uso medicinal de la mariguana mientras varios más se encuentran discutiendo iniciativas de legalización, descriminilazación o reducción de penas. Pero el mayor obstáculo lo representa la negativa del gobierno federal. El "zar" de las drogas Gil Kerlikowske, dijo a principios de mes en California que "la legalización de la mariguana --para cualquier propósito-- será imposible en la administración de Obama".

En la entrevista con GPS, el propioFelipe rechazó la tesis de su gobierno de que la violencia de los cárteles era estimulada por los contundentesgolpes de las fuerzas de seguridad:

Calderón: Cuando asumí el cargo recibí este problema creciendo, por varias razones, principalmente porque los cárteles tradicionales de la droga que solían exportar drogas hacia los Estados Unidos, empezaron a hacer nuevos negocios en México, probablemente desde hace diez años. Y el nuevo negocio consiste en vender y distribuir drogas en México y tratar de colocarlas entre la población. Y eso creo una nueva forma de operaciones, una nueva forma de diseminar la violencia, así que empezaron a luchar entre sí y esa es la principal razón de esta cantidad de homicidios en México.

Zakaria: ¿Así que no es la policía que va contra ellos, es una guerra interna por las drogas?

Calderón: Así es.

Felipe tampoco conoce los más elementales principios de economía, pues en su conversación con Fareed Zakaria opinó que: El punto central de los argumentos a favor de la legalización es cómo reducir el precio, el mercado negro, para poder reducir la violencia. Ahora, si los Estados Unidos, el mayor consumidor, establecen un precio, los Estados Unidos estarán estableciendo un mercado negro.

Si los Estados Unidos fijaran un precio legal de las drogas, como afirma Calderón, no se establecería un mercado negro, sino que dejaría de existir el que actualmente prevalece y domina el mercado determinando sus márgenes de ganancia. El alcohol es un ejemplo perfecto. Cuando había prohibición, la mafia se ocupó de satisfacer la demanda y fijar el precio. Cuando fracasó la prohibición, los mercados clandestinos se redujeron a su mínima expresión, haciendo más controlable el problema y metiendo en cintura a los productores legales, que debían asegurar la calidad, la seguridad y el precio adecuado de sus productos, al mismo tiempo que el gobierno les exigía el pago de impuestos, cosa que no sucede en el mercado de las drogas ilegales. Una futura regulación deberá reducir el precio de las drogas, a través de un control de precios o mediante impuestos, con el objetivo de quitarle los incentivos de lucro a las organizaciones criminales, pero tampoco tan bajos como para estimularelabuso de las sustancias.

Lo que subyace en la negativa de Calderón para proponer una legalización de las drogas es que hacerlo simplemente no le conviene políticamente y porque está convencido de que puede ganar la guerra, aunque nos tome cien años y un millón de muertos. Él mismo ha dicho que son justificables los 19 mil mexicanos asesinados porque hay riesgos "y muy graves, ¿pero qué otra obligación de gobierno puede ser tan importante como la seguridad y el Estado de derecho?"

El excandidato presidencial panista mantiene una posición de sumisión ante los estadounidenses al decir que "no tiene caso que los países en desarrollo, las economías más pequeñas, traten de legalizar o traten de modificar el problema en términos económicos, porque sería absolutamente inútil". Cualquier gobernante con un mínimo de dignidad y amor por su patria debería exigirle al gobierno más poderoso del mundo rectificar sus errores, por más inútil que esto parezca, no continuar bajo el mismo esquema fracasado.

El debate sobre la legalización es intenso e incesante en Estados Unidos y nosotros, como mexicanos, también debemos sumarnos a la discusión:

CNN: "La disponibilidad de las drogas ilegales está aumentando en los Estados Unidos, alimentada por una mayor actividad de expansión de los cárteles mexicanos de la droga, mientras que el abuso de drogas controladas está empeorando, de acuerdo al reporte National Drug Threat Assessment 2010, publicado el jueves".

El Diario de El Paso: "Como lamentable que el cambio de estrategia en el modelo contra el crimen organizado llegue después de tantos asesinatos en tierra mexicana, consideró Howard Campbell, antropólogo de la Universidad de Texas en El Paso... este giro se relaciona con el fracaso en la estrategia por parte de Estados Unidos y México"

Pal-Item, Indiana: "Cuarenta años después de nuestra declaración de la guerra contra las drogas, parece que hemos perdido el piso... es la hora de considerar cambiar las tácticas".

Opposing Views: "Si el gobierno de los EEUU hablara en serio en acabar con el poder de las brutales pandillas que se enriquecen con la prohibición, pensaría dos veces su guerra contra las drogas".

Great Falls Tribune: "Las personas alrededor del mundo han usado esta planta medicinal, espiritual y socialmente durante miles de años sin presentarse una sola muerte por sobredosis... ha llegado el momento de volverla a legalizar".

Student Pulse: "Al examinar estas estadísticas es claro ver cómo esta violencia (en la década en que se declaró ilegal el alcohol) se incrementó como resultado de la prohibición. Cada que una sustancia es ilegal, el mercado negro y el crimen organizado se aglomeran alrededor de esa sustancia. Como resultado, el crimen y la violencia aumentan ya que diferentes organizaciones intentan mantener el control y el trasiego ilegal de estos bienes. Si estas estadísticas son verdaderas en la prohibición del alcohol, ¿una política de prohibición de las drogas podría generar una explosión similar del crimen?