Cuando María de las Heras renunció a Milenio envió una carta a los directivos de esta empresa diciendo, en esencia, que no podía publicar sus encuestas en el mismo medio que difundiera las elaboradas por Liébano Sáenz y Federico Berrueto.
¿Por qué? Porque, según María y según casi todos los que en México saben de encuestas, Liébano y Berrueto son, en el mejor de los casos, muy malos encuestadores. Y en el peor, malos encuestadores que buscan con sus estudios proteger sus intereses.
La noche del lunes recordé las razones de María de las Heras para dejar Milenio Diario cuando, en Milenio Televisión, el conductor de noticieros Ciro Gómez Leyva dio a conocer la encuesta de Liébano Sáenz y Federico Berrueto relacionada con Oaxaca.
Simplemente Liébano y Berrueto mienten. Es falso que el candidato del PRI-PVEM, Eviel Pérez Magaña, lleve cuatro puntos de ventaja al candidato de la alianza PRD-PT-Convergenia-PAN, Gabino Cué.
La verdad de las cosas es que, en las encuestas serias, Gabino lleva entre seis y nueve puntos de ventaja. Liébano y Berrueto, por malos encuestadores que sean, no pueden ignorarlo. Si publican otra cosa, hay que atribuirlo a deshonestidad intelectual.
Tengo en mis manos una encuesta elaborada por la Secretaría de Gobernación el pasado cinco de abril. En esta, Gabino Cué Monteagudo tiene el 37.68 por ciento de las preferencias electorales, mientras que Eviel Pérez Magaña tiene el 31.80 por ciento. Es decir, el candidato de la alianza PRD-PT-Convergencia-PAN supera por seis puntos al del PRI-PVEM. En marzo, la ventaja de Gabino sobre Eviel en la misma encuesta era de 3 puntos.
Las encuestas de la empresa Parametría le dan todavía más ventaja a Gabino Cué.
¿A qué juegan, entonces, Milenio y Liébano Sáenz y Federico Berrueto? Milenio al comercio y a la política, no al periodismo. Liébano y Berrueto a la política y al comercio, no a la ciencia demoscópica.
No sería malo que jugaran a eso o a cualquier cosa legal que se les antojara, si no fuera por el hecho terrible de que con eso pavimentan el camino del fraude electoral.