Guerra, según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, es la "lucha armada entre dos o más naciones o entre bandos de una misma nación". Por otra parte, lucha, conforme a la misma institución, es el "esfuerzo que se hace para resistir a una fuerza hostil o a una tentación, para subsistir o para alcanzar algún objetivo".

De acuerdo a los dos contenidos semánticos anteriormente redactados, el que mejor describe la situación actual, en mi opinión, es el que expuse primero; es decir, el correspondiente al significante "guerra". Porque, en efecto, en este país se vive una lucha armada entre autoridades y el crimen organizado y entre los diversos cárteles que conforman a este último. Cada uno de estos representando a bandos de una misma nación. Y quien vea algo distinto a esto es porque se cree los embustes del gobierno federal y, recientemente, del titular del Poder Ejecutivo, quien afirmó nunca haber usado el concepto en cuestión.

Ayer, Miguel Treviño Hoyos, director del Consejo Cívico e Institucional de Nuevo León, le dijo a Calderón lo siguiente: “[...] si ya eligió usted el concepto de guerra para definir lo que estamos viviendo, no puedo imaginar tarea más importante para el comandante supremo que asegurar la unidad de propósitos y la coordinación de todas las instancias públicas que participan en ella". A lo que le respondió éste: "“Yo no he usado (el concepto "guerra"), y sí le puedo invitar a que, incluso, revise todas mis expresiones públicas y privadas". Esto último no es otra cosa que una mentira.

El Sr. Felipe de Jesús Calderón Hinojosa se ha referido a su empresa para combatir al crimen organizado como "guerra", por dar los ejemplos proporcionados por La Jornada, en las siguientes ocasiones:

5 de diciembre de 2006: "Trabajamos para ganar la guerra a la delincuencia"

20 de diciembre de 2007: "La sociedad reconoce el papel de la Marina en la guerra contra la inseguridad"

12 de septiembre de 2008: "En esta guerra contra los enemigos de México no habrá tregua"

Lucha la que realiza la Resistencia Civil Pacífica, la que ha mantenido el movimiento encabezado por Andrés Manuel López Obrador para resistir a las calumnias del duopolio televisivo, la que hemos emprendido quienes nos hemos sumado al Movimiento de Regeneración Nacional para alcanzar la presidencia y transformar, salvar a México.

Y es que sí, se está llevando a cabo una lucha en el país. Pero no es la violenta, la sangrienta, la que ha provocado esta situación bélica que ha traído consigo una terrible crisis social. La verdadera lucha es la de quienes quieren cambiar a esta República por la vía pacífica. Hoy quien lucha es la verdadera izquierda para llegar al poder e instaurar un Estado de Bienestar que fomente el crecimiento económico, la equidad, el progreso y la paz. Y nosotros no luchamos con armas. No. Nosotros luchamos creando conciencia.