El ministro Genaro David Góngora
Pimentel responsabilizó al gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto,
así como al actual procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, de la
violación grave a las garantías individuales en los hechos ocurridos en San
Salvado Atenco, en 2006.
Señaló que los mandos
superiores que planearon, organizaron y ejecutaron el desalojo y detención de
los manifestantes en mayo de 2006, son responsables directos e indirectos por
no haber supervisado el actuar de sus subordinados, no dar seguimiento a los
hechos violatorios de garantías cometidos por los policías federales y
estatales en los operativos y por su omisión en investigar de manera diligente
las denuncias presentadas por las víctimas por actos de tortura, violencia
desmedida y agresiones sexuales, en el caso de 31 mujeres.
El pleno de la Suprema
Corte de Justicia de la Nación continúa en la discusión del caso.