Ciudad del Vaticano, 12 Mar (Notimex).- Benedicto XVI lamentó por primera vez públicamente las críticas recibidas por perdonar la excomunión a cuatro obispos lefebvristas, entre ellos uno que negó el Holocausto, lo cual desató una profunda crisis católico-judía.En una carta enviada a todos los obispos del mundo y dada a conocer este jueves por la sala de prensa del Vaticano, el Papa explicó los argumentos que motivaron su perdón y aceptó los errores cometidos por la Curia Romana al enfrentar el problema.Reconoció que el levantamiento de la excomunión suscitó por múltiples razones, dentro y fuera de la Iglesia católica, un debate "de una vehemencia no vista desde hace mucho tiempo" e incluso algunos grupos acusaron al Papa de querer volver al pasado."Se desencadenó así una avalancha de protestas, cuya amargura mostraba heridas que se remontaban más allá de este momento", apuntó en el texto considerado por fuentes vaticanas como "extraordinario".El pontífice señaló que, por ello, ha decidido escribir la misiva la cual deseó se convierta en una "palabra clarificadora" que ayude a comprender sus intenciones y contribuir a la paz en la Iglesia.Se dijo contrariado por que las declaraciones de Richard Williamson, quien puso en duda en una entrevista de televisión la existencia de las cámaras de gas en los campos de concentración nazi, se superpusieron temporalmente al levantamiento de la excomunión.Así -escribió- un gesto "discreto de misericordia" apareció "de manera inesperada" como algo totalmente diverso: como la negación o un aparente volver atrás respecto de la reconciliación entre cristianos y judíos"Que esta superposición de dos procesos contrapuestos haya sucedido y, durante un tiempo haya enturbiado la paz entre cristianos y judíos, así como también la paz dentro de la Iglesia, es algo que sólo puedo lamentar profondamente", sostuvo.Reconoció además un error de comunicación del Vaticano que simplemente por internet podía conocer los comentarios de Williamson y anunció que, en el futuro, la Santa Sede deberá prestar "más atención" a esta fuente de noticias.Otro "desacierto" identificado por el Papa en todo el asunto consistió en la poca claridad sobre el alcance y los límites del perdón a los cuatro obispos lefebvrista establecido el 21 de enero pasado.Este perdón, recordó, no significa el regreso al seno de la Iglesia católica de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X (FSSPX), movimiento conocido como "lefebvrista", el cual aún no ha sido reconocido oficialmente por la Sede Apostólica.El líder religioso sostuvo que su misión como Papa lo obliga a buscar la unidad y esa es la razón fundamental de su perdón a los lefebvristas a quienes, insistió, no se les puede dejar simplemente fuera de la Iglesia por problemas del pasado.Con este documento Benedicto XVI intenta poner punto final a las polémicas suscitadas entre los católicos de Europa y otras partes del mundo por el perdón a los lefebvristas a quienes Ratzinger está decidido a lograr que regresen bajo la autoridad del obispo de Roma.