El pequeño de ocho años se subió a una ventana de su escuela en el tercer piso y no lograban hacerlo bajar.
Según publicó el diario El País, cuando el bombero Somchai Yoosabai escuchó a la madre del niño hablar sobre la pasión del pequeño por el super héroe Spiderman, se le ocurrió ir por el disfraz que guardaba en la estación de bomberos, el niño al verlo disfrazado de su héroe y ofreciéndole un jugo, sonrió y se tiró en sus brazos.
Al parecer Yoosabai guardaba el disfraz para animar los simulacros de incendio en los colegios.