Ginebra 26 Mar (Notimex).- El Consejo de Derechos Humanos adoptó hoy la controvertida resolución sobre difamación de religiones presentada por Pakistán en nombre de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI).Los países que votaron a favor fueron 23, entre ellos las naciones islámicas, Cuba, Nicaragua, Bolivia, China, Rusia, y varios países africanos como Sudáfrica, Nigeria y Egipto.Sin embargo, los países que se abstuvieron o votaron en contra fueron mayoría.En tanto, sumaron 11 países los que votaron en contra de la resolución que, según expertos, "atenta contra la libertad de expresión", y 13 miembros del Consejo de Derechos Humanos se abstuvieron de votar, entre ellos México.Entre los países que votaron en contra están la Unión Europea, Canadá y Chile, entre los que se abstuvieron de dar su voto figuran Argentina, Brasil, México, Uruguay, Japón y la India, que sumaron 13 países.Al explicar de manera enérgica su voto ante el Consejo, el embajador de Chile ante las Naciones Unidas, Carlos Portales, aclaró que "los únicos sujetos del derecho internacional de los derechos humanos, de acuerdo con su propia concepción y objeto, son los seres humanos"."Son los seres humanos los destinatarios de las normas, son ellos a los que debe protegerse en el ejercicio de sus derechos, entre los cuales se encuentra tanto la libertad de expresión, como la libertad de creer en una religión o no, más aún cuando constituyan minorías".El embajador de Chile subrayó que las distintas religiones no son sujetos del derecho internacional de los derechos humanos.Enfatizó la diferencia fundamental "entre la crítica a una religión, creencia o escuela de pensamiento y los ataques contra personas individuales por causa de su adhesión a tales religiones o creencias".Portales se refirió a la existencia varios artículos del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que establece la prohibición de la ley de toda discriminación contra las personas en función de la religión que profesen o que no.Asimismo, mencionó que dicho pacto dispone que mediante la ley deberá prohibirse toda apología del odio nacional, racial o religioso que incite a la discriminación, la hostilidad y la violencia y que es por esta vía que la humanidad debe avanzar."No por la vía de conceptos sociológicos que carecen de una definición jurídica común", indicó Portales."Por las razones señaladas es que Chile, por respeto a todas las creencias religiosas, por respeto a los que creen y a los que no creen y con un parlamento en el que alternan católicos, cristianos, protestantes, musulmanes y judíos, votará en contra de este proyecto de resolución".Por su parte el embajador de Alemania, Reinhard Schweppe, al hablar en nombre de los países de la Unión Europea (UE), se manifestó a favor de la tolerancia, la libertad de expresión y de creencia.El representante de Alemania dijo que este proyecto de resolución sobre la difamación de religiones sometido por Pakistán confunde el concepto de difamación con el de discriminación y consideró que un texto basado en derechos humanos sería más idóneo.Declaró que los países de la UE condenan tanto islamofobia y antisemitismo y es clara su lucha contra estos fenómenos.Al explicar el voto en contra, el embajador de Alemania dijo que es evidente que la intolerancia religiosa es un problema mundial y reconoció que "también los que no creen pueden sufrir violaciones a sus derechos humanos".Por su parte India, al explicar ante el pleno la abstención de su país, dijo que "este proyecto aborda el tema de forma inadecuada y destaca una religión en particular".Por su parte Pakistán, al presentar el proyecto, condenó los actos de discriminación racial basados en la difamación de religiones.El texto de la resolución observa con preocupación "la intensificación de la campaña general de difamación de las religiones y la incitación al odio religioso en general"."En particular la caracterización negativa de que han sido objeto las minorías musulmanas en razón de su origen étnico y su religión a consecuencia de los trágicos acontecimientos del 11 de septiembre de 2001", agregó.Asimismo la resolución deplora el uso de la prensa y los medios de comunicación audiovisuales y electrónicos "para incitar a actos de violencia, xenofobia o formas conexas de intolerancia y discriminación contra cualquier religión, o para atacar símbolos religiosos y personas venerables".Este párrafo, según expertos, hace referencia al sonado caso de las caricaturas de Mahoma que aparecieron en medios impresos de Dinamarca y Francia.