Pemex tiene planeado cotizar en la bolsa de valores los llamados "bonos ciudadanos" de Pemex.

De acuerdo con una nota de la agencia Reuters, Pemex pondría en la Bolsa Mexicana de Valores acciones especiales denominadas "tracking stock" (acciones de rastreo o de medición) que pagarían dividendos, pero no otorgarían a los compradores voto sobre las decisiones de la empresa.

Según la nota, sería la Secretaría de Hacienda donde se fraguó esta idea y donde se presentará formalmente la idea de acuerdo con fuentes que pidieron no revelar su identidad.

La nota de Reuter afirma que el gobierno ha hablado con banqueros y abogados sobre este asunto. Hacienda ha guardado silencio sobre el asunto.

El "tracking stock" causaría una enorme inconformidad social, ya que vulneraría la soberanía nacional al darle a intereses privados ganancias de Pemex.

No sólo eso; de darse una privatización directa de la paraestatal, quien tenga la mayor cantidad de acciones "tracking stock" sería quien se quedaría con la mayor parte de Pemex.

Desde 2008 el PAN hizo intento directo por privatizar Pemex mediante una reforma energética. Sin embargo, el movimiento en defensa del petróleo encabezado por el Presidente Legítimo de México, Andrés Manuel López Obrador, logró detener el intento de privatización en su forma original, quedando solamente algunos aspectos privatizadores en la reforma que finalmente se aprobó, como los bonos ciudadanos, los contratos "incentivados" y la contratación en bloque.