Sao Paulo, 1 Jul (Notimex).- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó en Libia que el golpe de Estado en Honduras, que depuso a su colega Manuel Zelaya, es un precedente peligroso y no será aceptado por el resto de América Latina."No aceptamos el regreso de los golpes en América Latina. Ya tuvimos experiencias de golpes militares durante la década de 1960", dijo anoche Lula da Silva durante su visita a Libia, donde este miércoles participa como invitado en la cumbre de la Unión Africana (UA).Zelaya fue expulsado el domingo pasado de Honduras por los militares luego de tratar de llevar a cabo una consulta sobre la elección de una Asamblea Constituyente, una iniciativa que enfrentó la oposición del Congreso, las Fuerzas Armadas y los jueces.El golpe de Estado ocurrido en Honduras es la mayor crisis política que vive Centroamérica en muchos años, recordó el mandatario brasileño, citado por el diario Jornal do Brasil.El mandatario brasileño también cuestionó la legitimidad del gobierno del presidente designado por el Congreso, Roberto Micheletti.Aseguró que el gobierno brasileño hará todo lo posible para ayudar a Honduras a volver al orden constitucional."¿La democracia significa que uno puede retirar a su presidente en la madrugada y colocar en su lugar a otro?", cuestionó retóricamente Lula da Silva, y agregó que "este es un precedente peligroso para toda la comunidad internacional"."Hemos rechazado toda forma de cooperación con Honduras porque ellos tienen que respetar el proceso democrático", dijo.Las declaraciones de Lula da Silva fueron formuladas anoche en Trípoli en la víspera de la cumbre de la UA en la ciudad libia de Sirte, donde Brasil asiste como invitado por su interés en promover las relaciones económicas con Africa.Durante la apertura de la cumbre de jefes de Estado y de gobierno de la UA, el presidente brasileño exhortó este miércoles a sus colegas africanos a condenar el golpe de Estado en Honduras y demandar que el presidente democráticamente elegido regrese al poder.Los temas centrales de la XIII Cumbre de la Unión Africana, organizada por el líder libio Muamar Gadafi, son la inversión en la agricultura, los conflictos en Somalia y Sudán, así como las elecciones en Mauritania y Guinea Bissau.