Caracas, 24 jul (EFE).- El presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, dijo que ha conversado por teléfono con "miembros asesores" cercanos al Gobierno de Roberto Micheletti desde el puesto fronterizo de Las Manos, donde cruzó de Nicaragua a su país.

En declaraciones a la cadena multiestatal Telesur, Zelaya indicó que está "en la línea fronteriza" y se declaró convencido de que su familia, que avanza hacia ese lugar en territorio hondureño, "va a pasar" los retenes policiales.

Señaló que junto a su esposa, hijos y otros familiares se están dirigiendo hacia el puesto fronterizo "varios dirigentes de los sectores sociales".

Zelaya hizo un llamamiento para "llegar a un entendimiento de respeto" y reafirmó "la voluntad soberana del pueblo en las urnas" que le eligió a él presidente.

El mandatario, derrocado el pasado 28 de junio, precisó que había mantenido tres llamadas telefónicas "con miembros asesores cercanos a ellos", en alusión al Gobierno de Micheletti, elegido por el parlamento hondureño tras su destitución.

"No quiero ir a provocar (...), si me asesinan el problema no se va a resolver", dijo Zelaya, quien reiteró que no quiere ser "causa de violencia".

"Vengo desarmado (...) con pecho descubierto", indicó el presidente depuesto, quien no dio más precisiones sobre los interlocutores con los que conversó por teléfono desde el lugar donde se encuentra en la zona fronteriza.

Según imágenes de la cadena Telesur, con sede central en Venezuela, se han producido incidentes en la zona hondureña de El Paraíso, donde se encuentran concentrados partidarios de Zelaya que intentan llegar hasta el lugar donde cruzó la frontera.

Momentos antes, Xiomara de Zelaya, esposa del depuesto presidente, afirmó que avanzaba junto a otros familiares hacia la frontera.

En declaraciones a Telesur, la esposa de Zelaya dijo: "Vamos a pasar caminando".

Xiomara de Zelaya hizo un llamamiento "a la conciencia de las Fuerzas Armadas y la policía", a los que se dirigió diciendo que "son y vienen del pueblo", y apeló a dar libre paso a quienes intentan llegar hasta el lugar donde está el presidente depuesto.

Asimismo, señaló que está avanzando hacia la frontera en compañía de sus hijos, de la madre de su esposo y de su propia madre, y agregó que hubo "disparos y bombas lacrimógenas" en contra de los partidarios de Zelaya en la zona fronteriza, aunque, pese a ello, señaló que "el pueblo no quiere retroceder".