.Guadalajara, 27 Jul (Notimex).- El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco cuenta con terapia láser de alta tecnología, para el tratamiento ocular de bebés prematuros que presentan algún grado de retinopatía.En un comunicado, especialistas del servicio de Oftalmología del IMSS Jalisco explicaron que esta enfermedad se caracteriza por el desarrollo anormal de vasos sanguíneos en la retina, que puede ocasionar ceguera si no se atiende de manera oportuna.Los expertos del Hospital de Ginecoobstetricia del IMSS, precisaron que la intervención con láser consiste en saturar la retina en donde no existen vasos sanguíneos para inhibir la producción de membrana, que propicia desprendimiento de esta capa interna en el globo ocular.Refirieron que en lo que va del año se han sometido a intervención quirúrgica con láser a 33 menores del servicio de prematuros del Hospital de Ginecoobstetricia, mientras que el año pasado fueron operados 59 bebés con esta técnica.Aseguraron que la deficiencia puede presentarse en el 40 por ciento de los menores nacidos en condiciones prematuras.En el servicio de prematuros se otorgan entre 200 y 250 consultas mensuales por este motivo, aunque no todos requieren de tratamiento quirúrgico, pero sí a base de oxígeno y fármacos."Alrededor de un ocho por ciento de prematuros que presentan ese padecimiento requieren de intervención quirúrgica", destacaron.El programa de detección oportuna de retinopatía en el IMSS Jalisco, que a lo largo de 20 años se ha instrumentado, arroja excelentes resultados, prueba de esto es que durante el 2008 no se registraron pacientes que perdieran la vista en uno o ambos ojos.Entre los factores de riesgo para que el menor presente retinopatía figura el que la madre padezca diabetes, porque los bebés nacidos bajo esta circunstancia son inmaduros dos semanas más que cualquier otro niño.Si la madre es fumadora, presentó sangrado en el embarazo, tiene problemas serios de salud o antecedentes de cáncer, tumores o leucemia, también aumenta el riesgo para el recién nacido.Una vez que un menor es detectado con retinopatía requerirá de la vigilancia del oftalmólogo para toda la vida. Debe ser valorado en el primer año de vida cada dos o tres meses, en el segundo año cada cuatro meses, a los seis años de edad cada seis meses y luego cada año.