Los Ángeles (EEUU), 16 sep (EFE).- El Parlamento de California se ha visto sorprendido por un escándalo sexual que cuestiona la ética de sus legisladores después de que uno de sus miembros fuese cazado "in fraganti" exaltando sus relaciones íntimas en una conversación con integrantes de "lobbies" empresariales.El republicano Mike Duvall se ha convertido en el centro de esta polémica después de que un micrófono abierto a destiempo en una sesión parlamentaria registrara una conversación en la que daba detalles sobre sus encuentros sexuales.Duvall, de 54 años, casado y defensor de los valores tradicionales, confesó a su compañero republicano Jeff Miller, en plena sesión e ignorando que su voz estaba siendo grabada, cómo se divertía con sus amantes."El otro día, el jueves, vino con su ropa interior, y el miércoles habíamos estado haciendo el amor. Me gusta darle azotes. Y ella me dijo: 'Sé que te gusta darme'. Claro, dije yo, 'porque eres una mala chica'".La conversación tuvo lugar a principios de julio aunque la polémica se desató cuando la cadena local de televisión KCAL se hizo con las cintas plenarias y emitió la exclusiva el martes.Duvall no tardó en dimitir después de ruborizar a la clase política estatal con su testimonio, especialmente al bando republicano, aunque se negó a admitir sus infidelidades."Quiero dejar claro que mi decisión de renunciar no es de ninguna manera un reconocimiento de que tuve una aventura. Mi delito consistió en meterme en una conversación inapropiada y me arrepiento del lenguaje y la elección de palabras", afirmó en un comunicado en su página web."Dimití con la esperanza de que mi decisión les permitiría (a los parlamentarios) regresar a los asuntos del Estado", añadió.Según informó KCAL, además del reprochable comportamiento privado de Duvall, el escándalo tiene un componente público que ensombrece la gestión del asambleísta.Las mujeres involucradas, ambas casadas, pertenecerían a dos grupos empresariales con intereses directos en el trabajo realizado por Duvall, vicepresidente un comité que regula servicios como electricidad y gas.Una de esas amantes ha sido relacionada con la compañía energética Sempra, con sede en San Diego, al sur de California.Este mismo año, Duvall votó junto con otros republicanos en varias ocasiones en contra de medidas favorables a la implantación de energías renovables, a las se opone Sempra."El uso de favores sexuales es solo un ejemplo más de las tácticas utilizadas por las empresas de energía para conseguir leyes favorables por parte de los legisladores", declaró Kathay Feng, presidente de la organización California Common Cause al diario Los Angeles Times.Ese mismo periódico confirmó que el Parlamento planea estudiar en profundidad a Duvall y la posible corrupción resultante de sus encuentros sexuales, incluso se valora ampliar esta investigación a otros presuntos casos de relaciones íntimas de asambleístas con miembros de "lobbies".Una de las primeras consecuencias del escándalo Duvall ha sido la expulsión del oyente de sus confidencias, Jeff Miller, del comité de Ética parlamentario del que era miembro y que se encargará de investigar las revelaciones del asambleísta.Tras destaparse las infidelidades de Duvall, se han disparado además los rumores sobre supuestas relaciones íntimas de políticos con personas del mundo empresarial en California en las que existiría un posible conflicto de intereses.El grupo conservador The Capitol Resource Institute, que hasta la fecha había apoyado a Duvall en todas sus votaciones cambió su parecer sobre el republicano después de lo sucedido."Es siempre decepcionante cuando un campeón de los valores tradicionales no los aplica en su vida privada", comentó Karen England, directora ejecutiva de esta entidad.El gobernador republicano de California, Arnold Schwarzenegger, tiene dos semanas para convocar elecciones especiales con el fin de encontrar un sustituto a Duvall, comicios que podrían costar a las arcas públicas más de 400.000 dólares.