Agentes de la policía de Coauhila tomaron hoy de madrugada la mina de
carbón de Pasta de Conchos y desalojaron de sus inmediaciones a varias
familias de mineros que fallecieron en ella el 19 de febrero de 2006 y
cuyos restos nunca fueron rescatados, informó el Gobierno del estado.
Fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública de Coahuila confirmaron
que la operación se desarrolló la pasada madrugada, casi a la vez que
otra encabezada por la Policía Federal en la mina Cananea del también
norteño estado de Sonora.
Tras los hechos, el colectivo Familia Pasta de Conchos emitió un
comunicado donde denunció la acción en la que, según la ONG,
participaron "veinte patrullas de la policía estatal de Coahuila" y
personal del Grupo México, operador de la mina.
"A las familias que se presentaron a los minutos del ingreso de la
Policía Estatal no se les permitió acercarse, ni tomar fotografías, ni
se les ha dado ninguna información" , agrega el boletín.
En su nota recuerdan que "existe una suspensión definitiva para toda
obra de exploración y explotación de carbón ordenada por la Secretaria
de Economía" en Pasta de Conchos, pese a lo cual creen que Grupo México,
a través de su filial, Industrial Minera México (IMM) , "intentará
nuevamente sacar carbón de la mina" .
"Violarán esta suspensión con el aval y el apoyo del Gobierno federal
que no hace otra cosa que simular legalidad" , agregaron.
Además responsabilizaron "de cualquier intento de intimidación y
agresión contra la integridad de las familias y de sus defensores" al
presidente de México, Felipe Calderón.
Ambas minas, Pasta de Conchos y Cananea, las explota la empresa Grupo
México.
En el caso de Pasta de Conchos, la mina está cerrada desde que en
febrero de 2006 un accidente ocurrido en una de las galerías le costó la
vida a 65 trabajadores, que no pudieron ser rescatados.
Desde entonces familiares de los occisos, con el apoyo del obispo de
Saltillo, Raúl Vera, han denunciado las precarias condiciones de
seguridad que había en la mina y exigido, sin éxito, el rescate de los
cadáveres.
Tras la llegada de la policía del estado a Pasta de Conchos familiares
de los mineros comenzaron reuniones para discutir las acciones que
seguirán en torno a esta decisión tomada por la empresa Grupo México y
las autoridades de Coahuila.
A propósito de los hechos, Cristina Averbash, portavoz del movimiento
Familia Pasta de Conchos, dijo que la presencia de las familias en el
lugar hasta ser expulsadas hoy es derivaba de "irregularidades que
persisten desde hace muchos años en la región carbonífera" .
Esta situación la está tratando de llevar el colectivo de apoyo a las
familias ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) .