"Los gobiernos no podemos darle solucion plena al problema (de la inseguridad)" declaró el ex-candidato presidencial panista, Felipe Calderón.

La admisión de la incapacidad del gobierno para resolver el problema ocurrió durante el evento que sostuvo en Ciudad Juárez para dar a conocer su nuevo plan contra el crimen.

Calderón pidió la "participación ciudadana", como resultado, para resolver el problema, pero no supo decir en qué consistía esta "participación ciudadana."

"Yo no se si es atraves de mecanismos de denuncia" dijo Calderón, quien tuvo que terminar diciendo que simplemente la gente marcara al 060 para reportar si estaban sufriendo un ataque.

Visiblemente nervioso, sudoroso, dando manotazos, y a veces teniendo problemas para poder sostener el hilo de lo que decía, Calderón terminó diciendo que "nos va a tomar muchísimo tiempo rescatar comunidades sanas."

Previo a esto, Calderón fue interpelado por una de las madres de familia de Ciudad Juárez que perdió a dos de sus hijos en la masacre ocurrida en Villas de Salvácar, quien le dijo al panista que su presencia no era bienvenida.

Calderón mencionó que ante la imposibilidad de resguardar a todo Chihuahua se buscará crear algunos "corredores de seguridad" donde la gente pueda transitar.

Dijo también que la probreza es una de las causas de la inseguridad, por lo que pretende resolver el problema integrando a los más pobres al programa Oportunidades. Es decir, busca resolver la tentación de que los pobres se incorporen al narco dándoles alrededor de 500 pesos mensuales.