Realmente esta tarde no somos un gran contingente. Pero hay
prominencias como Miguel Ángel Granados Chapa y Epigmenio Ibarra, que resaltan.
El primero apenas puede caminar, pero aquí está. Y el segundo carga con su
cámara de televisión.
Este sábado, frente al Ángel, nos podemos entrevistar entre
nosotros mismos. O simplemente marchar. El trayecto es corto. La protesta es lo
que importa.
Se saludan unos con otros, antes de que inicie la marcha.
Los que están aquí, se conocen. Hay viejos lobos de mar. Y también estamos los
novatos.
Hoy las cámaras y los micrófonos están enfocados hacia
nosotros. Hay historias duras. Hay reporteros que no aparecen. Y hay otros que
sí aparecieron, pero muertos. Lo que se muestra hoy, son sus caras, en
diferentes fotografías. Para ellos no ha llegado la justicia todavía. Por
ellos, precisamente, es esta manifestación.
12:30. Comienza la marcha.
Impera el silencio. Es más el ruido de los automóviles de
los otros tres carriles de Paseo de la Reforma, que el de nosotros. Sólo a
veces hay cuchicheo. Nadie grita. Uno alcanza a leer diferentes consignas.
"No queremos ser la nota. No más agresiones".
"Ni uno más".
"Le tengo rabia al silencio".
"Los queremos vivos"
Hasta el frente, un hombre lleva cadenas en la boca. Hay
otros que se la taparon con cinta adhesiva.
En el trayecto, se escucha un corrido de Andrés Contreras,
dedicado a los periodistas. Sólo alcanzo a escuchar:
"Únicamente anda armado con su pluma y su libreta... Hombre de
mente sagaz, la realidad interpreta.... Por cada escrito veraz, a la intolerancia
reta. Con cada nota que envía, su vida puede ir en prenda. Y se entienda o no
se entienda, esta es una realidad, ¡cuánto periodista muerto por publicar la
verdad!".
¿Y dónde están los dueños? ¿Y los supuestos líderes de
opinión?, pregunta una reportera.
Aquí no. Aquí está la gente que sale todos los días de su
casa para escribir, editar, o hacer la noticia. Y hoy le tocó serla.
ESTA MISMA TARDE, SDPNOTICIAS PUBLICARÁ LA LISTA DE POR LO MENOS 12 PERIODISTAS DESAPARECIDOS, DEL 2000 A LAFECHA.