Tuxtla Gutiérrez, Chiapas - A 100 años del inicio de la Revolución Mexicana, Andrés Manuel López

Obrador afirmó que todavía están vigentes las dos principales demandas

que dieron origen a la gesta de 1910: Justicia y democracia.

"Sostengo que siguen pendientes las dos grandes demandas de la

Revolución, que son la justicia y la democracia. En nuestro país ni hay

democracia ni hay justicia", puntualizó.

El presidente legítimo de México se manifestó por la vía pacífica

para concretar un cambio real y verdadero de la nación y sus

instituciones y descartó la opción armada como una salida para enfrentar

los grandes y graves problemas nacionales.

Aclaró que el movimiento por la transformación que encabeza a nivel

nacional "ha sido, es y será pacífico, pero respetamos a quienes piensan

que sólo mediante las armas van a cambiar las cosas".

En entrevista que concedió antes de una reunión de evaluación con

integrantes de los comités municipales del Gobierno Legítimo en esta

entidad, hizo una evaluación de casi cuatro de gestión calderonista.

"Felipe Calderón está rebasado, no hace nada por detener la

decadencia del país", afirmó y sostuvo que la mafia del poder, que

encabeza el ex presidente Carlos Salinas, usó y tiró, como un kleenex,

al presidente espurio.

Añadió: "Es como un kleenex Calderón, se le uso una vez y se le tiró".

Al dar a conocer que mañana se realizará una asamblea informativa en

el Hemiciclo a Juárez de la ciudad de México para conmemorar el cuarto

aniversario de la constitución del Gobierno Legítimo y el centenario de

la Revolución Mexicana.

Expresó sus respetos a todos aquellos movimientos que luchan por la

transformación de México, en particular al zapatista, por considerar

justas y legítimas las causas que llevaron al levantamiento armado en el

sureste mexicano.

En ese sentido, destacó que "no puede seguir en el país la

desigualdad económica y social que impera", pero insistió en su

desacuerdo con una eventual salida armada.

"No compartimos ese punto de vista. Sentimos que esa vía llevaría a

un mayor sufrimiento y al enfrentamiento entre hermanos, entre el mismo

pueblo, porque sería el pueblo contra los soldados y éstos últimos son

hijos de campesinos y de obreros, son del pueblo", explicó.

En cambio, los jefes de la mafia del poder, los integrantes de la

oligarquía sólo actuarían como meros observadores, porque la mayoría de

ellos "ya ni siquiera vive en el país, la mayor parte se la pasa en el

extranjero", agregó.

A diferencia de otros pensamientos, el presidente legítimo dijo que

el movimiento por la transformación "no quiere la confrontación ni un

mayor sufrimiento de la gente y tenemos la convicción de que sí se

lograrán los cambios por la vía pacífica".

Al respecto, en la reunión de evaluación, dejó en claro que una

eventual lucha armada en el suelo nacional alentaría la intervención

extranjera y México correría el riesgo de convertirse en una colonia en

un protectorado, con base militar, de extranjeros.

"Nosotros no lo vamos a auspiciar ni lo vamos a alentar, nunca", enfatizó.

Cuando los reporteros le preguntaron cómo vislumbraba el panorama

para 2011 y le pidieron su opinión sobre los cuatro años de

administración del presidente espurio, señaló que "Calderón está

rebasado, no hace nada por detener la decadencia del país, pero --aclaró---

hay que tomar en cuenta que la culpa no es sólo de Calderón, sino de

aquellos que lo impusieron en la Presidencia, porque Calderón no estaba

preparado para ser presidente de México, no estaba preparado ni siquiera

para ministerio público, mucho menos para titular del Ejecutivo

Federal".

Las consecuencias están a la vista, entre ellas la crisis económica,

social y política, así como la ola de violencia e inseguridad en todo

el territorio nacional, y los responsables de la descomposición

generalizada son precisamente los 30 integrantes de la mafia del poder,

encabezada por Salinas, porque no quieren perder privilegios, porque

quieren mantener el régimen actual de corrupción y de opresión, precisó.

Ahora, abundó, es fácil criticar a Calderón, ya cualquiera lo

ningunea y se convirtió en deporte nacional el hecho de criticarlo, a

tal grado que hasta en Televisa lo hacen veladamente, cuando antes los

locutores y comentaristas del canal de las estrellas le quemaban

incienso y le aplaudían.

Ahora, los 30 barones del dinero y Televisa tienen la puesta la

mirada en quien será su candidato presidencial para el 2012, el

gobernador priista Enrique Peña.

Definió a Peña como un artículo fabricado, como un muñeco, "como una

barbie masculina, que es fruto de Televisa, porque en sus espacios

llevan 6 años promoviéndolo y lo ha introducido al mercado como un

producto chatarra, es toda una telenovela", propia del canal de las

estrellas.

En otra parte de la entrevista se le preguntó sobre la propuesta de

la senadora Yeidckol Polevnsky como eventual candidata de la alianza

PT-Convergencia al gobierno del estado de México.

Se trata de "una propuesta del movimiento para enfrentar a la mafia

del poder en el estado de México y a Peña --que es a su vez el candidato

de Salinas y de Televisa a la Presidencia-- y al candidato que resulte

de la alianza de los dirigentes del PRD con el PAN", detalló.

Obviamente que Peña, el PAN y Salinas no ven con buenos ojos la

propuesta del movimiento, aclaró y explicó que "en su momento se hará la

presentación de la propuesta y se pondrá a consideración de las

dirigencias del PT y de Convergencia para que ellos, de acuerdo al

procedimiento legal, decidan si la van a postular o no".

Por lo pronto, "para nosotros ya es nuestra propuesta", destacó al

afirmar que Yeidckol Polevnsky es una mujer honrada, a diferencia de

Enrique Peña que es un gran corrupto".

Luego los reporteros le manifestaron que algunos gobernadores, a

quienes brindó su apoyo, ahora le dieron la espalda y hasta lo

traicionaron.

"Es algunos casos, pero en otros no. No es un asunto personal, yo no

exijo lealtades, sino que se le cumpla al pueblo, siempre lo he

planteado y hay quienes se alejan del pueblo y eso es un hecho, es una

situación evidente y también hay traiciones en el movimiento", comentó.

Durante los procesos de cambio, de transformación, "hay quienes se

quedan a la orilla del camino y otros traicionan, pero eso no significa

que se detenga la marcha para lograr la transformación del país",

subrayó.

Para mañana, López Obrador encabezará la ceremonia conmemorativa del

cuarto aniversario de la constitución del Gobierno Legítimo y el

centenario del inicio de la Revolución Mexicana en el Hemiciclo a

Juárez, a partir de las 5 de la tarde.