Los padres de una niña que nació con varios problemas de salud y dos hoyos en el corazón atribuyen la cura de sus males al Papa Francisco, quien aseguran, la sanó con sólo tocarla.
El padre de la menor, tras haber esperado por tres horas a que el automovil del pontífice pasara en Roma, dejó que uno de los agentes del servicio secreto la cargara y llevara junto al soberado de la Ciudad del Vaticano, quien la besó en la frente.
La madre cuenta que una vez de regreso a los Estados Unidos, llevaron a la pequeña a una cita con el cardiólogo, y descubrieron que uno de los hoyos de su corazón se había cerrado y el segundo se redujo a la mitad.
La familia está convencida de que se trata de un milagro, por lo que se sienten sumamente agradecidos con el pontífice.
Con información de Telemundo.