A tan sólo un par de días de haberse casado, un árabe de 34 años le pidió el divorcio a su pareja, luego de verla por primera vez sin maquillaje durante su viaje de luna de miel.
Los enamorados se encontraban en la playa Al Mamzar y según varios testigos, parecían muy felices. Sin embargo, el encanto se rompió cuando al contacto con el agua, el rostro de la mujer perdió el maquillaje.
Como relata el diario Gulf News, el hombre argumentó que su esposa no se ve tan bonita como antes de la boda, lo que significa un engaño, pues incluso sus pestañas resultaron falsas.
Asimismo, tras una investigación, el árabe descubrió que la chica se había sometido a varias cirugías estéticas, por lo que abandonó la casa en la que vivían juntos.
En cuanto a la mujer, fue necesario inscribirse a terapia para superar el rechazo de su marido. El terapeuta declaró que el hombre se negó a cualquier tipo de reconciliación.