El Instituto de Cognición Humana y Robótica de Florida, EU, se prepara para enseñar a su creación, Atlas, a hacer labores domésticas.
El robot, por lo pronto, ya ha aprendido a barrer y a utilizar una aspiradora.
La avanzada máquina también ya sabe, sorprendentemente, cómo doblar objetos y colocarlos en un lugar más conveniente.
Lo único que faltaría para que Atlas se vuelva la salvación de todos los perezosos en sus hogares es que aprendiera a lavar los trastes y la ropa, ¿o no?