Lee Jae-yong, vicepresidente de Samsung Electronics y único hijo del multimillonario presidente de la compañía, fue detenido después de que una corte en Corea del Sur aprobará su arresto este viernes, envuelto en un escándalo de corrupción en que se vio involucrada la presidenta de ese país, Park Geun-Hye.
Su padre, Lee Kun-hee, también habría enfrentado cargos penales, siendo condenado entre 2008 y 2009 por evasión de impuestos y malversación de fondos, pero fue perdonado por el gobierno y posteriormente se alejó de su cargo en la empresa, un destino similar que podría enfrentar su hijo.
A causa de la detención, algunos expertos conservadores muestran preocupación por la forma en que la situación afectará a Samsung, a su vez que influiría en la economía del país, sus exportaciones y puestos de trabajo. Otros más afirman que estas preocupaciones son una exageración y creen que la única forma en que se afectaría el negocio es si las ventas de los teléfonos Galaxy bajaran o su desempeño en el sector de los semiconductores disminuyera,
Lee es heredero de una de las familias más ricas de Corea del Sur fue acusado de sobornar a la presidente y a una de sus colaboradora con un monto de hasta 36 millones de dólares, esto con el fin de ganarse el apoyo gubernamental ante la transición del liderazgo en la empresa, además de una polémica fusión de dos compañías de Samsung.
La corte demostró que había evidencia suficiente para detener a Lee, quien puede ser retenido hasta por 20 días aunque no se le hayan presentado cargos formales; algunos medios locales reportaron que fue colocado en confinamiento solitario dentro de un centro de detención, en el que se encontraba tras comparecer ante tribunales este jueves.
Con información de AP y AFP.