La primera vez que escuché el verbo aforar fue en Secundaria cuando la Maestra de Química nos explicó como completar el líquido contenido en un frasco de vidrio llamado matraz con agua hasta la línea que se denomina de aforo… por eso el sistema de ahorro llamado Afore hacía recordar muy noblemente ese mecanismo de completar o rellenar.
Yo todavía como trabajador del Gobierno en el año 1999 alcancé el sistema de ahorro para el retiro al que teníamos derecho en esa época, pero nos explicaron que se iba a cambiar al sistema de Afores con aparentemente más beneficios, pero, quebró el banco que nos iba a asesorar, Bancrecer, y después tuvimos que conseguir por nuestra cuenta la manera de que nuestras afores fueran resguardadas en otros bancos para después en el futuro poder recibir esos beneficios que sonaban a rellenar, completar, aforar.
Mi padre falleció, desafortunadamente contra su destino en Enero del 2015, él era trabajador y tenía su Afore en el Banco fuerte de México, al que acudí con mi madre, con el último recibo de esa Afore y con el acta de defunción de ese gran hombre que me enseñó a pensar, más sin embargo el gerente de ese banco con letrero rojo nos explicó que así no era la manera de cobrar el dinero que mi padre tenía ahorrado en su Afore, que teníamos que acudir a las oficinas del IMSS (Instituto Mexicano del Seguro Social) para realizar todos los trámites necesarios para que mi madre recibiera ese dinero.
Acudí con mi madre a todas las oficinas del IMSS a las que nos fueron dirigiendo, debo reconocer que durante los 5 meses de trámites en todo momento la atención de todos los servidores del IMSS fue excelente y profesional, eso si hay que reconocer de la burocracia mexicana, pero, al finalizar los trámites, nos explicaron que mi madre no podía recibir el total del dinero que estaba como total en el recibo de la Afore de mi padre, que si lo iba a recibir, pero en mensualidades hasta que se completara el total, aproximadamente en 7 u 8 años según entendimos, también nos ofrecieron que si recibía ese dinero en otra institución bancaria que recomendaban podía recibir un poco más, pero mi madre es fiel al Banco fuerte de México y prefirió recibir ahí esas mensualidades que hasta hoy le depositan, incluyendo también la pensión y otras prestaciones de ley.
Yo pienso que si mi padre se enterara todavía de lo que sucede en este Mundo terrenal, le hubiera dado más gusto que mi madre recibiera por herencia el total del dinero que él tenía ahorrado en su Afore, para así completar una de sus misiones en la vida, porque humanamente, cuando vas recibiendo ese dinero en mensualidades, no lo valoras ni lo utilizas de igual manera.