No sé si a Francisco José Calderón Lelo de Larrea le guste que le digan monero. Se dice de Paco que es un caricaturista e historietista. Andrés Manuel López Obrador lo calificó, ni modo, cito a Wikipedia: “Monero de la derecha”. Pero Calderón es ante todo un periodista, de los mejores que tiene el país. Nunca esconde su ideología y critica parejo, aunque sus votos sexenales hayan sido antiPeje.
{username} (@g_bouillon) December 2, 2018
Hoy veo Reforma y la crítica se disipa, el apunte de dos blancas palomitas (“…démosle el beneficio de la duda”) contrasta con un presidente López Obrador caricaturizado como chivo. Es lo de menos. Lo que me interesa es el escenario, el decorado. Andrés Manuel como un chivo en cristalería. ¿Perdió el tino Paco con este cartón? Sí.
¿Qué es “irse como chivo en cristalería”? Cometer actos que acabarán por destruir lo ordenado, ese orden fino. La frase se relaciona con otra, “darle vuelo a la hilacha”: “La palabra ‘hilacha’ significa: Un pedazo de hilo que se desprende de la tela. La Real Academia Española lo define como ‘residuo o vestigio’. Darle vuelo a la hilacha es cometer actos que terminarán por destruir o desgastar el tejido sin medir las consecuencias. También se usa ‘irse como hilo de media’, ‘dejarse ir como chivo en cristalería’, ‘como gorda en tobogán’”.
Reviso en Internet a qué se refiere la “cristalería” de Paco Calderón: “Las piezas básicas con las que debemos contar en una cristalería son: copas de agua, copas de vino y copas de cava-champán.
“También es el conjunto de objetos de cristal que forman parte de una vajilla. Igualmente, se le llama cristalería al establecimiento donde se fabrican o se venden objetos de cristal, en especial cristales para ventanas, espejos, etc.
“La categoría de la presentación de una mesa está indicada por la calidad de la cristalería fina de sus copas, vasos y jarras. Las copas de cristal tienen en sus transparencias –sin coloración agregada–, en la delgada lámina y en el perfecto torneado las más importantes virtudes. La sonoridad del cristal que repercute al recibir un suave golpe de los dedos en la parte superior también indica mezcla ideal de componentes, tiempo justo de crisol y perfecta terminación artesanal. La transparencia perfecta del cristal permite observar el color y la textura de los vinos o bebidas espirituosas que se sirven en ellas, como así también el aroma y bouquet que son al anticipo de la bebida a paladear”.
Para Paco Calderón Andrés Manuel es un chivo en cristalería, es decir, al dar de topes y saltar cometerá un desastre. Es su opinión. Mi opinión es que tres décadas de neoliberalismo no hicieron de México un país transparente, sonoro, torneado en virtudes políticas y empresariales. Al contrario, México es un desastre. México no es esa “cristalería” fina, es un crisol del saqueo. No nos heredaron ninguna cristalería, ningún país perfecto –más que lámparas exquisitas de techo y candelabros: tenebrarios. En efecto, Miguel de la Madrid, Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto no heredaron esa perfecta cristalería que ve el caricaturista como país, como México.
La metáfora del monero Calderón puede ser humorística para muchos, su problema es que es inexacta, imprecisa y, también, ficticia, ergo, falsa, engañosa, fraudulenta. Ni modo, otra vez será.