Previo a su primer informe de gobierno al frente del municipio de Cozumel, Perla Tun Pech realizó un foro dinámico con mujeres de la Isla enrolado al tema “mujer-poder”, un espacio encaminado a la motivación y valor de las mujeres en las actividades sociales, familiares, económicas entre otros.

Durante este foro, la edil de Cozumel hizo una confesión, dio testimonio de las situaciones que puede enfrentar una mujer o una niña, como en su caso que fue víctima de abuso sexual, sin enfatizar de qué tipo.

 Una declaración de esta magnitud merece su justo reconocimiento y es sumamente valioso Perla Tun Pech se haya atrevido a compartir una experiencia personal y que gracias a la resiliencia logró superarlo y otorgó el perdón a su agresor.

 Sin embargo nuevamente Perla Tun no sabe enfocar sus ideales, a pesar de la apreciada declaración de una trágica experiencia, no enfocó el objetivo y desbordó el feminismo hacia el lado equivocado, al sustentar que su abusador le enseñó a que ella vale como mujer.

 El objetivo “mujer- poder” se vio viciado ante tal ejemplo, toda vez que en nada tiene que ver una declaración de esta naturaleza con el valor femenino. Una confesión de ese tipo sustentando que fue lo que le dio impulso, queda completamente fuera de lugar en un espacio de empoderamiento de género.

Dichas palabras tienen cabida si estás en una conferencia o charla sobre abuso sexual, derechos humanos o violencia de género; pero si no era en ese contexto, Perla Tun está siendo ahora la abusadora al viciar una experiencia personal para invocar a la compasión y que manifiesten los oyentes “pobre mujer, con todo eso, ha salido adelante”.

 Su papel en este momento es de autoridad. Su declaración, - ya que la hizo- tendría que ir acompañada no sólo de decir que logró perdonar, sino que esa experiencia personal le ha marcado para poner todos sus esfuerzos en el combate de dicho tema y cerrarle el paso a la impunidad de la que gozan millones de abusadores en México y particularmente en Quintana Roo, donde existe un alto índice de abuso sexual a menores.

 Y precisamente porque ella lo vivió, es por lo cual no desea que ningún niño, niña, adolescentes o mujeres en su isla vivan algo así, porque así como lo manifestó, prácticamente detalla que los abusadores de infantes (pedófilos) son quienes tienen lecciones que enseñar a los niños, y esto es aberrante.

 Una vez más queda en evidencia que Perla Tun Pech no es docta en organizar y filtrar de manera óptima sus ideas cuando las expresa y la lleva a cometer garrafales errores verbales que terminan siendo ofensivos.

Si Perla Tun fuera defensora de los derechos humanos podría tomar este penoso hecho del que fue víctima lamentablemente, como banderín de lucha para trabajar a favor de la infancia, pero no lo es, es una servidora pública y política con intereses electorales a la vuelta de la esquina.

Otorguémosle el beneficio de la buena voluntad a la ex diputada local y cuestionemos, ¿cuántas iniciativas de ley impulsó y cuántas fueron aprobadas durante su paso por el Congreso del Estado sobre este tema? Y ahora desde la presidencia municipal ¿cuántos programas  ha atendido y ha puesto en operatividad para prevenir, atender, sancionar y erradicar la violencia sexual contra menores en Cozumel?

El resultado es nulo, Perla Tun Pech monta un tema personal para llamar la atención y convocar a la compasión y así nadie hablará de sus tropiezos como servidora pública.

 Es aplaudible el valor con el que afrontó Perla Tun Pech una situación indeseable para cualquier niño o niña, pero el presente es ahora, es servidora pública, la máxima autoridad en la ínsula y lo que vale son sus acciones del hoy.

 Insistimos, cuáles son los programas y resultados, si es que los hay  que ha generado Perla Tun Pech como presidenta para la protección de los derechos de las niñas y niños de Cozumel.

Perdonar a los victimarios es parte del proceso de sanación de un acto doloso pero eso no significa que deben quedar impunes, las bendiciones no cubren un delito, proyectarlas en un foro de motivación siendo tú la autoridad sin proceder, para ganar la conmiseración es igual de delictivo.

EN EL OJO DEL HURACÁN

 Y entrados en temas político-electorales y de violencia de género, el ejemplo claro de lo que es proponer efectos legales para erradicar actos violentos es la iniciativa de ley que propuso la edil de Puerto Morelos, Laura Fernández Piña al solicitar al congreso se realice una reforma para frenar estos actos negativos contra las mujeres que desempeñan una actividad política.

Laura Fernández hizo la solicitud ante la máxima tribuna del Estado con el objetivo de frenar estos hechos de los que ella ha sido víctima. Dicha reforma que ya fue aprobada establece el principio de paridad de género en la postulación de candidatos a diputaciones locales así como ayuntamientos.

Asimismo establecer causales del delito, sanciones contra partidos o funcionarios que atenten contra las aspiraciones en materia política y así castigar a toda personas que pretenda coartarlas, acciones que garantizan oportunidades, respeto y no violencia.

Estas reformas a las leyes del estado y la constitución política de la entidad consolidan protección de los derechos políticos de las mujeres en Quintana Roo.

 Que no son en beneficio unilateral de su promotora, Laura Fernández sino de todas las mujeres interesadas en el servicio público sin colores partidistas.

LO QUE LAS COPETUDAS CUENTAN

Todo se encuentra listo para la celebración del CCVII aniversario de la Independencia de México la noche de este 15 de Septiembre y el 16 el desfile militar en Quintana Roo.

Este será el primer acto de independencia que encabece el Gobernador del Estado, Carlos Joaquín González, así como los once alcaldes municipales.

Muchas copetudas habrán, luciendo sus mejores galas y aportando mucha información para los próximos días que sin dudarlo estaremos dando cuenta, sobre todo de la principal calificación de este tipo de actos como es la ovación o el descontento con muchos ¡viva México! Desde lo más profundo de las entrañas de los asistentes. Y como dijera la tía Jovita: “Si cada uno de los mexicanos hiciera lo que le corresponde la patria estaría salvada”.