Las opiniones, imputaciones, recomendaciones e informaciones de @Javier_Alatorre en su noticiero del viernes pasado, a propósito de las recomendaciones del encargado de la estrategia del Covid19 del gobierno federal @HLGatell, que se sintetizan en la expresión “ya no le haga caso a Hugo López-Gatell”, en donde engloba el universo de informaciones y recomendaciones que el responsable de la estrategia contra el Covid19 ha hecho a la población mexicana para proteger la salud de l@s mexican@s y eventualmente su vida, es, por lo menos polémica desde cualquier punto de vista. Vayamos al punto básico, el ético para no entrar en un debate jurídico-filosófico de la libertad de expresión y sus límites.
Los artículos 256, 259 y 261 de la vigente Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión establecen lo que doctrinalmente se denomina como autorregulación regulada; es decir, un paso intermedio entre la ley y la ética, donde la normatividad establece que los concesionarios de radio y televisión deben contar con un código de ética y un defensor de la audiencia, pero no interviene en el contenido ni en la elaboración de este instrumento normativo. En este sentido, en su página web TV Azteca cumple formalmente con esta obligación legal y tiene publicado su código de ética que rige, entre otros rubros, el relativo a las características que deben observar por así decidirlo libremente sus contenidos programáticos. El código de ética de TV Azteca es un pieza modélica del buen hacer periodístico y retoma las mejores expresiones de la experiencia ética comparada en medios audiovisuales del mundo . El problema es cómo asegurar razonablemente que el deber ser ético creado libremente por TV Azteca transite por el mismo sendero de su programación que, en casos como éste de las afirmaciones de @Javier_Alatorre, resultan difíciles de explicar de compaginar.
Es verdad que la ley le otorga tiempos máximos al Defensor de la Audiencia para pronunciarse sobre un tema controversial, pero no prohíbe que lo haga de forma inmediata como se antoja necesario en este caso. Independientemente de lo anterior es de esperar que el próximo lunes el propio @Javier_Alatorre se pronuncie sobre el tema en donde tiene dos caminos: a) Reconocer su error como lo prevé el propio Código de Ética de TV Azteca en el apartado de criterios informativos en donde en el numeral 9 dispone que: “Reconoceremos y subsanaremos los errores cometidos, aun cuando el o los afectados no lo pidan y antes de que el público lo exija”; o b) Reiterar en forma argumentada que lo que ha dicho se ajusta plenamente al instrumento ético de su empresa y con ello TV Azteca cumple en producir, como dice su propio Código de Ética,“ los mejores contenidos de habla hispana del mundo, no sólo para entretener e informar, sino para formar a la sociedad”.