Tu derecho al voto, mi derecho al voto, nuestro derecho al voto, nada ni nadie lo puede condicionar, es libre y secreto.

La elección 2015 sin duda, será un parteaguas en lo que al voto diferenciado concierne, hoy los ciudadanos difícilmente confían en los partidos políticos y no ven en ellos un total de candidatos que a su criterio merezcan el voto en su conjunto, los ciudadanos hoy ven personas, es con base en ello que toman una decisión, sin importar a qué partido político pertenezcan, buscan en cada uno de ellos o ellas al que reúna el mayor número de aptitudes para desempeñar el cargo por el que compiten, esto no debe asustar a los partidos políticos y sus respectivos candidatos, al contrario,  debe de motivarlos a seleccionar a las mejores mujeres y hombres para que los representen, aquellos que puedan demostrar integridad, capacidad, honestidad y experiencia, no están compitiendo por un puesto de tamales, están compitiendo para gobernar o legislar.

Respetar ese derecho es obligación de las Instituciones y gobernantes en turno, no pueden obligar a los empleados a votar por tal o cual candidato o partido político en su conjunto, mucho menos condicionar su permanencia en el empleo, no pueden afectar sus garantías individuales ni violentar sus derechos. Al igual que los dirigentes sindicales, no tienen el poder de decisión sobre cada uno de sus agremiados, su obligación en todo caso es acercar a los candidatos para que expongan sus propuestas, pero de ninguna manera pueden comprometer el derecho de votar o ser votado de cada uno de los trabajadores sindicalizados.

Mientras en los partidos políticos persistan las prácticas que favorecen al interior y no a la ciudadanía, la democracia no estará completa, mientras los gobernantes en turno inclinen la balanza en favor de aquellos que puedan proteger sus fechorías o intereses, no habrá transparencia ni gobiernos libres.

Así, seguirán existiendo esas prácticas llamadas "negociaciones" entre las cúpulas partidistas, que no son otra cosa más que hacerse de la vista gorda ante el chiquero que deja el antecesor.

Claro, esto es como el chupacabras, nadie lo ha visto, pero de que existe, existe.

Se deben de ir acostumbrando y preparando para aceptar que hoy la sociedad es contestataria y participativa, están informados. Las mayorías absolutas son cosa del pasado, los carros completos, son parte de la imaginación fantasiosa de dirigentes con una visión poco clara y muy lejana a lo que es la realidad. Votar es un derecho y una obligación, si no votas, no te quejes.

El voto diferenciado jamás deberá de ser cuestionado. ¡Les guste o no, es tu derecho!

Laura Tamés V.

@LauraTames