Crisis por Covid-19 en México y en el mundo
La crisis de salud provocada por la expansión de la pandemia de covid-19, ha ocasionado una depresión económica severa en México y en la mayoría de los países del orbe; esto por el cierre de diversas actividades económicas, así como por las medidas de confinamiento y aislamiento social que se tomaron para detener el avance del virus. Esta enfermedad no solo ha cobrado la vida de millones de personas, sino que ha arrinconado en la pobreza a millones personas en el orbe.
El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) hizo público hace unos días un informe en el que estima que, debido a la crisis desatada por el nuevo coronavirus, entre 8,9 y 9,8 millones de mexicanos han caído en la pobreza debido a una disminución de sus ingresos, estimaciones que, según la institución.
Según estimaciones del Banco Mundial el coronavirus produjo el año entre 119 y 124 millones de nuevos pobres en el mundo, cifra que podría escalar a entre 143 y 163 millones para este 2021, y se tendrá aumento en la desigualdad por efecto de la crisis sanitaria.
El estudio de la institución bancaria internacional nos dice que América Latina y el Caribe, la pandemia habría elevado el número de pobres de 23.9 millones a 27.4 millones en el mejor escenario para luego descender a 26.6 millones este 2021, pero en su escenario pesimista la cifra alcanzará los 27.6 millones en 2020 y se mantendrá sin cambios este año. De no haber ocurrido la pandemia, la expansión del virus de SARS-CoV-2 cerraría probablemente este año con 23.3 millones de personas en pobreza en la región.
La pobreza en sexenios
El aumento de la pobreza en México no empezó con la pandemia de Covid-19 ni con el Gobierno de la Cuarta Transformación (4T) este problema tiene muchos años y se debe a políticas erráticas de los gobiernos federales.
En la administración del expresidente Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) la pobreza en el país aumentó en forma alarmante, según datos de Coneval del 2008 al 2010 el número de pobres en México se incrementó, de 49 a 52 millones y según datos de la CEPAL en el 2012 en el único país de América Latina, en donde no disminuyó la pobreza y hasta aumentó fue en la nación azteca.
El gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto, tampoco fue muy eficiente en disminuir la pobreza en el país, ya que entre 2012 y 2014 el porcentaje de mexicanos en condición de pobreza subió del 45,5 por ciento al 46,2 por ciento del total de habitantes hasta llegar a los 55.3 millones de personas, reportó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social.
El informe indicó que la pobreza extrema ha visto una ligera disminución de 11.5 millones de personas a 11.4 millones. Sin embargo, la población en pobreza en general ha crecido de 41.8 millones a 42.9 millones en los dos primeros años de la administración peñista.
En agosto del 2015 José Antonio Meade Meade fue nombrado por el expresidente Peña como Secretario de Desarrollo Social en sustitución de Rosario Robles.
Al frente de la Sedesol excandidato a la presidencia en 2018, puso en marcha la Estrategia Nacional de Inclusión Social centrada en abatir las seis carencias sociales delineadas por Coneval educación, salud, seguridad social, vivienda, servicios básicos y alimentación. Los primeros resultados de esta estrategia fueron presentados en 2016 por la institución que mide la pobreza y en un documento técnico que observó la reducción del número de personas en situación de pobreza (53.4 millones) en comparación con 2014 (55.3 millones).
La disminución del número de mexicanos en situación de pobreza, presentado como un gran logro de la administración peñista no estuvo exenta de polémica, debido al cambio en la metodología para medirla.
De un día al otro los hogares más pobres del país, sin saberlo, pasaron de tener un ingreso un tercio superior al que se creía luego de que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) anunciara un cambio en la forma de medir el ingreso.
El cambio de metodología del Inegi para conocer el ingreso gasto de los hogares de los mexicanos, basado el Módulo de Condiciones Socioeconómicas (MCS) y no en las Encuestas de Ingreso y Gastos de Hogares (ENIGH) que desde 1984 han servido para estimar, entre otros, el ingreso y la distribución por segmentos de la población (deciles) y son la base para las mediciones de pobreza del Coneval.
La nueva metodología del Inegi al aplicar la encuesta, llevó a una disminución estadística en el número de habitantes en situación de pobreza e hizo incomparables los resultados del MCS 2015 con años previos. Todo ello originó que se cuestionara severamente los “supuestos logros para abatir la pobreza en el país”.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía el cambió a la metodología para medir con cuánto sobrevive cada hogar pobre del país y esa modificación implica que, al menos en las estadísticas, los ingresos mensuales aumenten 33.6 por ciento de un año a otro; alrededor de mil pesos.
El número de pobres en México ha aumentado en los últimos años a pesar de que no hubo pandemia de Covid-19 pero, hay muchos analistas y comunicadores que olvidan lo pasado y quieren culpar de esto al actual administración del aumento de la pobreza de los mexicanos.