Con los tiempos quemados en el Poder Legislativo por el exceso de trabajo, particularmente con la aprobación de la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos de la federación, los senadores en lo particular también tienen sus propias presiones, el nombramiento del titular de la Comisión de los Derechos Humanos.
El tema se complicó desde que fue exhibido un video donde se afirma que el senador Monreal emitió tres votos en lugar del único que le tocaba, no obstante que el grupo de senadores del MORENA afirmaron lo contrario, sin embargo la elección quedó cuestionada por ello.
El grupo parlamentario que encabeza Ricardo Monreal asumió que el tema debía ser resuelto de la mejor manera, para ello planteó originalmente dar una solución política. La negociación. La otra sería repetir la elección, sin embargo ello significaría violentar la constitución y el Derecho, al realizar cuatro elecciones en lugar de tres, señalamiento hecho en su momento por el PAN y también por el PRI.
La solución conforme a Derecho habría sido regresar la terna a comisiones para ser sustituida por otra terna, ahí habría bastado solo quitar a un miembro de la terna, que no necesariamente podría haber sido quitar a la señora Piedra, sino mantenerla en la nueva terna y luego repetir la votación, pero parece que para una segunda votación, ya las cuentas no le saldrían a MORENA, como se tenía planeado, para cumplir con la voluntad del Presidente Obrador, ello lo complicó.
Finalmente se optó por tomarle protesta, manteniendo firma la elección cuestionada. Pero en el momento de tomar protesta se desbordó el reclamo de la oposición, subieron con pancartas y se dio un lamentable connato de violencia en la cámara de senadores, se exhibieron las miserias humanas, los abusos de un poder absoluto y la ignorancia y bajeza de la mayoría de los legisladores, que no midieron la imagen que proyectaron a nivel nacional e internacional, sin duda estallaron los errores y la falta de cordura y grandeza de miras por todas partes. Pocos fueron los senadores que se salvaron, no más de un puñado, pocos los que fijaron su postura frente al pueblo de México y mantuvieron su imagen de doctos en materia jurídica y alto nivel de señorío. El buen oficio parlamentario habría dictado que la oposición se saliera del recinto y subrayar con su ausencia, su inconformidad y no avalar una decisión en la que no se está de acuerdo, seguramente habría tenido mucho mas impacto a nivel internacional, aunque hay que reconocer que no así lo habría tenido en el común de los electores mexicanos cuya capacidad de crítica y discernimiento es pobre y limitada. No mencionaremos los nombres porque no es el tema, pero los hubo en el uso de la tribuna y otros desde su escaño, con calidad y prudencia en el PAN, en el PRD, en Convergencia, en el PRI y hasta en el Ecologista, prudencia en unos cuantos de MORENA, a quienes por cierto, que tiradores, aprovecharon para atacar al líder de MORENA en el Senado Ricardo Monreal.
Sin duda la misma presidente de la CNDH, nombrada así, si conociera a profundidad la función que le toca desempeñar, sabría, que la principal fortaleza que debe tener un presidente de la CNDH es su calidad moral y al ser cuestionada, debiera renuncia, para limpiar y transparentar la calidad del cargo. Como persona sensible y por encima de un sueldo o cargo, si hubiese renunciado, sin duda dejaría un enorme legado de prestigio a la institución y ella particularmente habría crecido enormemente en autoridad moral, y no exageramos al sostenerlo, pues sería uno de las pocos miembros de MORENA, que aún sin cargo alguno, tendrían una altísima calidad moral, sería un altísimo patrimonio moral de MORENA. Pero es claro que esa dimensión le es desconocida, por ser reservada solo para los grandes espíritus y que por cierto, escasean en estos tiempos.
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@EduardoSadot