"El hombre prudente no está dispuesto a someterse a ninguna responsabilidad que su deber no le imponga" 

Adam Smith

Sin salida

En su discurso de campaña, Andrés Manuel López Obrador fue enfático en que se ayudaría a los pobres durante su gobierno con la inclusión de programas sociales y apoyos monetarios que vendrían a paliar sus necesidades.

Pero todo indica que la pobreza extrema en México no se ha reducido, sino que el presidente con la política de austeridad, los errores estratégicos en materia económica auspiciados por la pandemia del Covid-19, han llevado a que la brecha de la pobreza en el país sea más grande.

De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Geografía e Informática, durante el periodo que lleva el sexenio de Andrés Manuel López Obrador la cifra de pobres en México se ha elevado a 10 millones de personas más.

El asunto de todo es que pareciera que el gobierno federal está más que empecinado en darle un giro a la forma de hacer política, centralizando en manos del presidente López Obrador los recursos para poder operar en los estados para este 2021.

Al menos es la propuesta que fue presentada para el Presupuesto de Egresos de la Federación, que tiene serios recortes en todas las áreas, incluso en las más sensibles como la Seguridad Pública, donde se propone la desaparición del programa Fortaseg.

Pero vamos más allá, aunque no es descabellada la idea por haber posibilidades, se prevé que exista un enfrentamiento social de diversa índole en la forma en cómo se está comportando la economía mundial.

Para que se dé una idea, la propuesta del PEF propone reducir el recurso a los estados entre un 2.1 a un 7.4 por ciento de acuerdo con estimaciones y a la capacidad de los estados para este 2021, un recorte al que ya se viene ejecutando desde que comenzó este gobierno.

El presupuesto viene reducido para todo, no vienen contemplado proyectos grandes, más que el Tren Maya, Dos Bocas, el aeropuerto de Santa Lucía y de ahí todo lo demás de obra social no viene contemplada.

En la propuesta de paquete económico presentado por la Secretaría de Hacienda y que ya está en manos de los diputados federales y senadores se pretende un recorte a los estados por casi 110 mil millones de pesos en comparación a lo destinado en el presente año.

Pero para que vea la gravedad del tema, es que este 2020 los estados están ejerciendo 63 mil millones de pesos menos en comparación con el 2019, además que durante este año fiscal se han hecho otros recortes presupuestales.

Por citar el caso de Sinaloa, le han quitado este año mil 300 millones de pesos y en aquí Sinaloa tenía una reducción de 6 mil millones de pesos menos para el ejercicio de este año, una cifra que pone en jaque las finanzas estatales.

Y por si fuera poco, 2021 se tiene contemplado para el estado una reducción de más de 3 mil millones de pesos, en números reales un 6.1 por ciento menos para ejercer durante este año donde las necesidades y los recursos son necesarios.

La cuestión es que aquí solo citamos un caso, Sinaloa, pero la situación no es tan diferente en las otras 31 entidades del país, la cuales han hecho malabares para conseguir recursos en esta pandemia por el Covid-19.

Pensando en el tema electoral, 2021 es un año donde se pondrá en juego 15 gubernaturas, se renovará la Cámara de Diputados, municipios, diputados locales, todo parece indicar que López Obrador quiere crear enfrentamientos entre el pueblo y los gobiernos por la falta obras, recortes a programa, reducción de padrones de apoyos, y un largo etcétera, donde se reivindique el gobierno federal.

Recuerde que los reclamos sociales de la gente de los estados no se enfocan en el presidente López Obrador, se enfoca en el gobernador y en los alcaldes que no le cumplen a la gente... ¿estrategia o no? Por ahí alguien dijo, piensa mal…

México era un país que iba en progreso, dando aires de tener una economía consolidada apoyando a los emprendedores, para que se fomentara el empleo, apoyo a empresas, a sectores productivos, en fin la economía se iba despertando, pero cayó en una pesadilla.

Este 2021, el gasto federalizado, el que se enviará a los estados tendrá los niveles, fíjese bien, de 2016, recursos de hace cinco años, cuando los precios de ese año se han incrementado, las demandas suben y los recursos no alcanzan.

Contrario a eso, López Obrador tiene una gran bolsa de dinero, enorme, pues este año se tiene un incremento en los programas sociales que el presidente tiene a su favor y elige a quién y cómo dárselo, y nos cortamos las manos si no lo usa para el tema electoral que se tendrá en el país.

El problema de todo es que el pueblo no se da cuenta quien le "aprieta el pescuezo". El enfoque será similar a la elección de 2018, no habrá un contrapeso en el Congreso de la Unión y ahí es donde se prevé una debacle total en los siguientes tres años de López Obrador.

La única encuesta para esto será en las urnas en junio de 2021. Y a lo que se ve, no está enterado de lo que está pasando; con esto se cumple el pronóstico, se ahorca a los estados, que tienen que andar mendigando recursos extras y traerlos con bozal y correa.

Así las cosas en la 4T.

mlizarraga1@entreveredas.com.mx

Facebook, Instagram y Twitter: PeriodistaMarco