La vocación y el esfuerzo de miles de enfermeras
Hace un año y un mes que la pandemia por COVID-19 llegó a nuestro país, perturbando nuestra vida en todos sus aspectos. Hemos enfrentado múltiples retos, y todas y todos hemos puesto algo de nuestra parte, ya sea como padres o madres, como hijas e hijos y, por supuesto, como profesionistas para salir adelante.
Si bien ha sido un esfuerzo solidario de un gran país, destaca, de manera especial, la entrega, la vocación y el esfuerzo de las 141 mil 7 enfermeras y enfermeros que integramos el Instituto Mexicano del Seguro Social.
Hoy el pueblo de México reconoce el protagonismo heroico y revalora los servicios de enfermería, pero también es cierto que en su momento el miedo y la incertidumbre ante el enemigo mortal y desconocido llevaron a que una parte de la ciudadanía agrediera a nuestros compañeros y compañeras.
Frente a las complejas circunstancias de los primeros momentos de la pandemia, junto con el Director General del IMSS, el Maestro Zoé Robledo, consideramos vital hacer un llamado nacional para detener las agresiones que tendían a incrementarse.
Con todo el apoyo de mis compañeras, compañeros y de la Institución, tuve la oportunidad de participar en la conferencia diaria sobre la situación del Coronavirus para exponer a las y los mexicanos que el personal de enfermería es vital para salvar vidas y, que para cuidarlos necesitamos de su comprensión y protección.
Se trató de un llamado desde el corazón para aclamar por la justicia a favor de las mujeres y hombres que no dudaron un solo instante en sumar su experiencia para enfrentar la crisis sanitaria, poniendo sus conocimientos, inhibiendo su propios miedos, prejuicios, ideas y valores.
Resiliencia
Fue, también, un momento en el que quedó de manifiesto la fuerza de todo un gremio que ante la adversidad privilegió el valor y la vocación de trabajar por la salud de las personas que lo necesitaran, incluso por encima de su propia salud, de su familia y de su vida. Será un momento que nunca olvidaré.
La resiliencia fue muy necesaria y encontró su mayor soporte en vínculos de solidaridad y comunicación permanente en todas las entidades de la República que nos han permitido identificar y orientar, desde los primeros días, al personal de enfermería que sufre algún tipo de agresión.
Implementamos el “Reporte del personal de Enfermería del IMSS sujeto a agresiones durante la contingencia por COVID-19”, con el objetivo de obtener de manera formal, detallada e inmediata, los datos de nuestras compañeras y compañeros agredidos en cualquier estado de la República.
Creación de un grupo de atención psicológica
Simultáneamente, se desarrollaron acciones innovadoras como la creación de un grupo de atención psicológica en línea para el personal que había enfrentado alguna situación de violencia y/o agresión.
Asimismo, promovimos el uso del uniforme clínico exclusivamente dentro de las unidades médicas, medida que permitió que nuestro personal no fuera blanco de algún tipo de ataque durante sus traslados.
Conscientes de la responsabilidad de proteger a toda costa al personal se desarrolló, con la aportación de un equipo multidisciplinario, el “Protocolo de acompañamiento al Personal del Instituto Mexicano del Seguro Social, víctima de agresiones de cualquier tipo durante la contingencia de COVID-19”, a través del cual se definieron los mecanismos para otorgar asesoría y acompañamiento a todos los trabajadores de la salud.
El IMSS agregó un valor especial a la anticipación de circunstancias de riesgo, por lo que se realizó una amplia campaña de difusión entre el personal de enfermería para que implementaran acciones preventivas en su cotidianidad, fuera de las instalaciones hospitalarias, para evitar riesgos.
El cuidado del personal se extendió más allá de las instalaciones y por ello se implementaron programas de transporte y hospedaje gratuito en donde se garantizaba un entorno seguro. Sin lugar a dudas, seguir cuidando al personal requiere de políticas públicas novedosas que garanticen su seguridad dentro y fuera de las instalaciones.
La pandemia de Covid-19 nos ha dejado aprendizaje
La pandemia por COVID-19 ha dejado mucho aprendizaje en varios sentidos, uno de ellos es la experiencia de encabezar al gremio de Enfermería en el IMSS, es un privilegio, que agradezco infinitamente. Representa una gran oportunidad en mi carrera profesional, pero sobre todo en mi vida personal, es un reto que implica entrega total, misma que no podría llevar a cabo sin mi extraordinario equipo de trabajo, la gran colaboración de mis colegas de nivel central, incluido IMSS Bienestar y por supuesto sin el profesionalismo y pasión que caracteriza a todo el gremio de Enfermería del IMSS.
El episodio de las agresiones por fortuna tomó un rumbo favorable, ya que el número y la frecuencia de agresiones al personal de enfermería disminuyeron considerablemente gracias al apoyo solidario de la sociedad mexicana, sin su empatía, comprensión y participación activa, no hubiera sido posible.