Una muy mala noticia para México que la agencia calificadora Standard & Poor's haya recortado la calificación soberana de nuestro país de ‘BBB+ a BBB’, manteniendo la perspectiva en negativa. (Nota: después de publicado este artículo S%P redujo las calificaciones crediticias de Pemex y JP Morgan estimó una contracción de 7% en la economía mexicana)

¿Qué debe hacer el gobierno del presidente AMLO? 

Desde luego, apoyar primero a los pobres, algo que ya se está instrumentando mediante los programas sociales que son el sello distintivo de la administración del presidente López Obrador.

Pero también, les guste o no al querido Andrés Manuel y a sus colaboradores de izquierda más cercanos, tienen que aplicar algunas medidas que no han estado dispuestos a implementar:

Tren Maya

Para empezar, cancelar o posponer uno de los proyectos emblemáticos de la 4T; pienso en el Tren Maya más que en la refinería de Dos Bocas. Los recursos se necesitan en otras áreas de la economía.

Empresarios, empresarias

Además de lo anterior, comprometerse con toda seriedad a apoyarse en —y apoyar a— los mejores hombres y mujeres de negocios de México para defender millones de empleos formales hoy en riesgo.

Conste, hablo de los mejores en el sector empresarial, no de aquellos pillos que incomprensiblemente Andrés Manuel ha puesto como ejemplo de solidaridad: Germán Larrea, quien nada hizo para rescatar a los mineros atrapados en Pasta de Conchos, y Agustín Coopel, quien violó la ley electoral en 2018 al pagar a algunos publicistas contenidos de propaganda contra el candidato López Obrador.

Que hoy donen algunos pocos millones de pesos, de los muchísimos que tienen, no hace de ninguna manera a Larrea y a Coppel paradigmas de honestidad, así que no hay ninguna razón para que el presidente de México los presente como héroes en las mañaneras.

AMLO debe recurrir a empresarios y empresarias sin afanes protagónicos, decentes y dedicados, dedicadas al trabajo que no tienen las riquezas de Slim —o de Larrea o Coppel—, y que no han hecho del cinismo su ideología, como Salinas Pliego, pero que con su esfuerzo mantienen la gran planta productiva de este país.

No necesita Andrés Manuel mencionarles en sus conferencias de prensa, pero sí debe, si quiere sacar a la nación adelante, colaborar con ellos y ellas, ayudarles a no quebrar y entender lo que necesitan. El jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, sabe quiénes son y qué necesitan. Son los emprendedores, las emprendedoras a quienes Carlos Salazar, del Consejo Coordinador Empresarial está obligado a representar y defender, aunque le cueste su amistad con el presidente de México; Carlos, un hombre de negocios que se ha ganado la confianza de Andrés Manuel y que, diría su amigo Luis Donaldo Colosio —se conocieron en las aulas del Tecnológico de Monterrey— no es un heredero que viene de la cultura del privilegio, sino que se hizo desde abajo en la cultura del esfuerzo.

Constellation Brands

El presidente López Obrador debe dar marcha atrás a la cancelación de las obras de construcción de la cervecería Constellation Brands en México, después de pactar con sus propietarios la firma de una obligación de invertir mucho más de lo que tenían contemplado en planes para ahorrar y reusar agua. Esto regresará la confianza a la comunidad empresarial nacional y extranjera.

Defender la 4T

Querido Andrés Manuel: es lo mínimo que debe hacerse para que la 4T no sufra excesivamente en esta etapa de caos económico global.

Tu gobierno, presidente López Obrador, no puede de ninguna manera fracasar, y no fracasará porque es la última esperanza que tenemos los mexicanos de vivir en un país viable, pacífico, productivo y guiado por la ética.

Por favor, Andrés, aunque no haya estado en tus planes, deja que la cervecería de Mexicali siga adelante; apoya a empresarios de verdad, no a impresentables como Larrea y Coppel, y deja para otro sexenio al menos una de tus obras emblemáticas. Porque tu proyecto, para consolidarse, tiene que continuar cuando tú te vayas. Pero, para que no se interrumpa, para seguir ganado elecciones en el futuro, hoy tienes que hacer lo que tú y algunos de tus colaboradores no quieren. No hay opción.