45 mil muertos por Covid-19, más de 55 mil por violencia, Pemex quebrado y llevando al país a su ruina con su caída. Una economía parada, más de un millón de desempleados. Pero el tema para López Obrador en su mañanera es avisar que se celebrará el grito el 15 de Septiembre.
Fue pedir en la mañanera del lunes, donde se “presentó” el avión presidencial, que no se hablara de muertos, ni del impacto de Hanna en Nuevo León, Tamaulipas. Tan solo centrarse en el avión y los cachitos de su rifa.
La burla por bandera. Poco importa que seamos el país con mayor número de muertes en personal sanitario por falta de equipo de protección. Con una curva de contagios que no cesa. Se dice que ya está domada y que las muertes sigan.
Poco importa que las instituciones más serias a nivel nacional e internacional señalen la importancia del uso de cubre bocas si López Obrador y su lacayo consideran que no es importante. Han olvidado que son ejemplo y si no lo usan, millones de mexicanos tampoco lo usarán. Esos contagios son su culpa directa. El no usar el cubre bocas es una burla al conocimiento científico.
La burla (ya olvidada) de pedirle permiso a la madre tierra para construir el tren maya, cuando usará diésel (sumamente contaminante) y el trayecto destruirá miles de árboles, todos los cenotes de la península (por la vibración del tren) y de forma similar, pondrá en jaque áreas arqueológicas.
Sorna absoluta el permitir comprar medicina en el extranjero de forma directa y sin licitaciones, cuando los principales laboratorios extranjeros están en México y con ellos podrían hacerse las compras consolidadas. Sin olvidar la burla a los laboratorios mexicanos y a todos quienes ahí laboran.
Burla a la investidura presidencial que un seudo periodista sea tan zalamero, lisonjero y sea siempre invitado a la mañanera. No se diga del nombramiento de otra periodista que se dedicó a alabar a la 4t y hoy –sin credenciales necesarias- es cónsul en Turquía.
Hipocresía a la 4, obligara a los empleados federales a un recorte del 17 o 20% de su salario y quitarles el aguinaldo, lo cual es un derecho. ¿Dónde está su empatía que exige a los empresarios del país?, ¿dónde el respeto a los derechos humanos del trabajador y a la Ley Federal del Trabajo que no permite el NO pago del aguinaldo o la disminución de sueldos? Tal vez se defienda de que la LFT no es usada para los funcionarios del gobierno federal.
Burla cuando se inaugura una escuela de baseball con un valor de 70 millones de pesos, la cual no se usará hasta pasada la pandemia, pero no hay dinero para comprar insumos médicos.
Insufrible la mofa cuando dice querer a todos los mexicanos, pero encuentra que la CFE puede quemar combustóleo para producir la energía más contaminante del planeta, lo cual impactará en la salud de todos los mexicanos.
Chanza de mal gusto la insistencia de salvar a Pemex, cuando el dinero ahí invertido podría servir para muchas necesidades urgentes del país.
Es vergonzoso, López Obrador usa la burla por bandera de manera sistémica. Ya sea para evadir la realidad, para ocultar pifias o simplemente porque no sabe y no quiere gobernar. Solo ser el show de una mañanera donde se carece de logros o propuestas, tan solo se propone una burla simple y directa de sus opositores y una más cruel hacia quienes dice querer y defender tanto.