México es la Casa de Todos
México vive momentos de polarización muy peligrosos promovidos desde el poder político. Todo se maneja desde una agenda maniquea: buenos versus malos; conservadores versus liberales; progresistas versus tradicionalistas; norte versus sur; ricos versus pobres; mujeres versus hombres; o, chairos versus fifís. Desde la perspectiva del liderazgo político, México es un país en blanco y negro.
Esta visión de país no solamente es alimentada por MORENA, también lo hacen los partidos políticos de oposición quienes, ante la falta de un líder importante, solo les queda contrastar y exhibir los resultados del gobierno federal. Esa posición de contraste, sin duda, a quien mas conviene es al partido en el gobierno, ni PAN, ni PRI, ni PRD tienen mucho que presumir y para MORENA como estrategia electoral es la que mejor resultado le ha dado. El gran problema de estas “estrategias de contraste” con motivos electorales es que dejan al país y a la sociedad profundamente divididos.
La polarización en México
En el México de hoy existen tres grupos:
1) Los lópez- obradoristas, muchos de ellos por conveniencia.
2) Los que están totalmente en contra del Presidente.
3) Los que no queremos un regreso al pasado y simpatizamos con la idea de cambio político y social.
Las secuelas de esta división, le están haciendo un daño profundo a la sociedad mexicana en su conjunto.
Nuestros niños y jóvenes no están aprendiendo y solo se están entreteniendo con las redes sociales
No estamos enfrentando juntos, como sociedad y como mexicanos, los terribles desafíos que la realidad nos impone. La pandemia que ha desnudado el sistema de salud; la caída de los ingresos petroleros que por décadas han sido la base del gasto publico; los problemas de la sociedad contemporánea por la era de la híper información por internet; los terribles efectos económicos para las familias mas pobres que dependen de la economía informal después de un año de aislamiento social; la pobreza de nuestro sistema educativo que de por si no estaba preparado para dar un educación de calidad, mucho menos virtual; nuestros niños y jóvenes no están aprendiendo y solo se están entreteniendo con las redes sociales; la inseguridad publica donde gran parte del territorio nacional ha sido tomado por el crimen organizado; y para no seguir haciendo una lista exhaustiva, la nueva ola de feminismo que, con todos sus argumentos reales y legales contra la cultura machista, radicalizado pierde el gran objetivo de su causa convirtiéndose en un nuevo ingrediente de polarización social.
Para los políticos y el círculo rojo
Si aceptamos que el país esta dividido en tres grupos, los menos visibles somos los que queremos un cambio político real que profundice la democracia, acote al poder público y de soluciones a causas, a problemáticas sociales que son los grandes retos nacionales. Para los políticos y el círculo rojo solo hay dos grupos, pero en realidad somos tres. Los que están a favor del Presidente, los que están en contra, y nosotros, los que estamos a favor de la unidad, de la reconciliación.
Miles de mexicanos quieren vivir tranquilos
Debemos enfrentar grandes problemas y no lo estamos haciendo porque cada quien tiene su propia agenda, sus intereses que no son comunes. Esta división, repito, es lo mejor para los intereses políticos y económicos de las elites de siempre y de la recientemente empoderada clase política de izquierda.
Hay un grupo de mexicanos que deber ser representado y ninguno de los bloques partidistas actuales son una opción. Habemos miles de mexicanos que queremos vivir tranquilos y en familia y que proponemos reconciliación y paz para nuestra nación.
En Partido Encuentro Solidario, (PES) no podemos ver a México en blanco y negro por la sencilla verdad de que somos un país lleno de colores.
PES, propone un México que saque lo mejor de nosotros.
México, justamente por nuestras diferencias, es una nación excepcional. Nuestra riqueza cultural, la diversidad de nuestras regiones, de nuestras creencias, de nuestras tradiciones, de nuestra música, de nuestra gastronomía, justo eso nos ha hecho la nación que somos hoy.
Ese México comunitario, familiar, cálido y solidario es al que queremos despertar. Ese México a colores, distinto, pero unido en el fondo por un espíritu de solidaridad es al que necesitamos para hacer frente a los grandes retos que la actualidad nos impone.
Ese México que saque lo mejor de nosotros es el que propone el PES. Juntos mexicanas y mexicanos, familias y comunidades, debemos luchar contra la pobreza, la desigualdad, la inseguridad publica, los nuevos retos de la sociedad globalizada y los que tenemos como seres humanos, como individuos y como familias.
Para ese reto necesitamos líderes que nos conduzcan a la Paz y a la Reconciliación, que con alegría nos lleven a entender que:
México es la Casa de Todos.