Veré si puedo sintetizar mis comentarios al video de Reforma con el discurso de Don Alejandro Junco, líder moral y editorial de este antes poderoso conglomerado de prensa escrita. Trataré de ser cuidadoso con mis palabras, no quisiera convertirme en un enemigo más de los que dice Don Alejandro Junco tiene por su ejercicio periodístico. Ojalá que mis palabras no sean tomadas de esta manera.
La parábola de compartir la buena semilla del vecino
En su discurso habla Don Alejandro de una hermosa parábola de un campesino que comparte su mejor semilla de maíz con sus vecinos para así con la tras polinización lograr mejores cosechas entre todos y no echar a perder su maíz con polen chafa de los vecinos. En dicha parábola se da una lección del trabajo de equipo, la bondad y el don de compartir los frutos y las semillas.
¿No son esta masa amorfa llamada internet y sus subproductos que son los medios sociales y las redes sociales un gran campo de maíz? ¿No están las redes sociales llenas de campesinos digitales tratando de esparcir las semillas de su conocimiento diario, de sus vivencias, de sus sentimientos y razonamientos?
¿Qué pasa cuando un internauta quiere consultar un twit de Reforma? Se encuentra con un "jardín amurallado" (término acuñado por el experto digital Seth Goding), 140 caracteres compuestos de un texto como gancho y un link que te lleva a un abstracto de la nota, pero si quieres leer más tienes que pagar por ello. En el discurso se escuchó hermosa la parábola, pero ésta no se encuentra en la política editorial digital de Reforma, la noticia digital la venden, la semilla no la regalan a sus vecinos.
El alud de información y la viralización de las noticias ha matado el modelo de la noticia de pay per view. Al modelo lo asesinó el internet mismo. Siento mucho la muerte del sistema capitalista de noticias de Don Alejandro, pero el populismo también se ha apoderado de los medios de información digital y al pueblo no le gusta pagar por las noticias.
La anécdota del DDT
En su discurso don Alejandro compara a Donald Trump con el DDT, y utiliza una anécdota para ello. En una de sus frases dice que Facebook es un peligro para la democracia.
Quiero creer que don Alejandro piensa que Facebook y su algoritmo desalmado hizo presidente a Donald Trump. En su discurso así lo da a entender. Pasaré a darle la razón. Donald Trump tenía el doble de seguidores en Facebook que Hillary Clinton, 12 millones de ellos. Pero no solo eso, Donald Trump tenía más del doble de interacciones en Facebook que su competidora. Si a eso le sumamos el doble de búsquedas en Google y más comentarios positivos en twitter que la Sra. Clinton, definitivamente, las redes sociales favorecieron a Donald Trump.
La democracia está hoy en Facebook y no en un todo poderoso consejo editorial. La democracia no son los escritos del periódico Reforma y sus satélites, ni las líneas editoriales dictadas por sus poderosos consejeros, la democracia está compuesta por la gente que va y emite su voto.
El maldito algoritmo desalmado
En su discurso don Alejandro arremete feo contra Facebook, creo que eso va a tener muy preocupado a don Mark Zuckerberg. Acusa a Facebook de poseer un algoritmo que está constantemente estudiando los gustos de las personas, para que en su timeline aparezca justo lo que quieren ellos y sus amigos ver. De nuevo le doy la razón a don Alejandro, eso hace el algoritmo maldito de Facebook. ¿Pero no es eso justamente lo que intenta hacer un medio de comunicación? ¿Ver que es lo que está en la agenda pública y el interés de la gente para reflejarlo en sus publicaciones?
La diferencia es que el algoritmo de Facebook es superior a un consejo editorial, no tiene el error humano, la conciencia, la línea, el chayote, el embuste, el cosquilleo de hacer temblar a un funcionario público, y lo más importante, no pierde el tiempo. En cuestión de segundos Facebook, Twitter y Google saben lo que es una tendencia y la viralizan. Un consejo editorial tarda horas. Por ello las noticias de mañana ya son noticias viejas para quienes hoy las vimos en nuestro timeline de nuestras redes sociales.
Don Alejandro también acusa injustamente al algoritmo de Facebook de propagar información falsa en los timelines de sus usuarios. Para corroborar esto pasé a darle una visitada a mi timeline de Facebook, no tengo muchos amigos, alrededor de 911 y 131 followers adicionales que no son mis amigos. Me pongo a buscar noticias falsas y no las encuentro por ningún lado. Es más, tengo a una amiga preguntando que le recomendamos visitar en su ciudad, a otra preguntando que le podemos explicar sobre la reforma energética y el aumento de los combustibles, un amigo lamentando la muerte de la princesa Leia, un anuncio de un colchón que puedo probar gratis por 30 días, a mi diputada local Flor Ayala con un hermoso video de una posada que hizo en un barrio y a la tremenda Sarah con su sobrina en brazos y un bote de Tecate en la mano.
Por ningún lado vi a Reforma ni a ningún otro medio. Me hubiera encantado verlos comentándole a mi amiga que lugar visitar en su ciudad con respecto a algún reportaje que hicieron en su sección viajes, o a mi amigo consolándolo con una monografía de la princesa Leia, o a mi amiga explicándole con uno de sus muchos reportajes de hoy sobre el gasolinazo y la reforma energética. Pero no, no estaban ahí, están muy ocupados con su consejo editorial. Otros están interactuando con mis amigos.
Como dato al margen el mexicano promedio en Facebook tiene 265 amigos y alguien tiene que decirle a don Alejandro que uno cree mucho en sus amigos, es más hasta las mentiras les cree uno a sus amigos.
Muchas cosas digitales están reemplazando a las analógicas, los autos que se conducen solos vendrán a reemplazar a los choferes de Uber que se quedarán en su casa leyendo y escribiendo en su Facebook mientras su auto trabaja por ellos. Así también el periodismo digital vino a desplazar al periodismo analógico. Justo ayer leí una interesante nota donde el Washington Post ya tiene de nuevo utilidades y comenzará a contratar de nuevo a periodistas, claro, periodistas con alma digital. ¿Qué está haciendo Reforma y sus satélites al respecto?, ¿Quejándose? De buena fuente sé que está invirtiendo millones de pesos en un fallido proceso de digitalización y en asesorías que no lo han llevado sino al despeñadero digital. Habrá que virar ese barco si quiere sobrevivir.
La envidia del share ajeno
Cuenta don Alejandro de cómo una noticia falsa sobre el calentamiento global tuvo casi los mismos shares que una escrita por un científico especializado en el tema. Como bien dicen los norteamericanos, “Shit Happens”. No en pocas ocasiones he visto como medios “tradicionales” han tomado como ciertas noticias generadas por El Deforma, sí, este medio digital de noticias falsas y de sarcasmo puro. Hay que dejar de ver la paja en el ojo ajeno.
No pude sino leer entre líneas un poco de envidia al share ajeno. El Deforma tiene casi 2.5 millones de seguidores en su página de Facebook, el periódico Reforma tiene 700 mil, SDP Noticias 3.7 millones.
La última noticia que vi publicada en la página de Facebook de Reforma fue sobre la investigación de la muerte de un elefante, no tenía UN solo share. A nadie de sus 700 mil seguidores le interesó compartirla. Mientras que la última noticia falsa de El Deforma sobre el verdadero Arjona, tiene 154 shares. No quisiera quedarme con la comparación con una noticia falsa, así que nos vamos a los 319 shares que tuvo una noticia verdadera publicada en SDP Noticias, donde se habla de un joven que infectaba deliberadamente con VIH. Todas las publicaciones tenían por lo menos 40 minutos de haber sido lanzadas, esto para medir con justicia el share.
La envidia no lleva a nada, solo el trabajo arduo, el estudio, el regalar la noticia (la semilla del campesino), y las estrategias digitales correctas pueden llevar a un medio a que conquiste el Share de las audiencias. ¿Por qué la gente comparte algo en su muro? Simple y sencillamente porque le da su gana y quiere que sus amigos lo vean.
Pesos y balances. Los soldados de la verdad
El consejo editorial es un peso y balance en un medio impreso como bien lo hace saber don Alejandro en su discurso. Pero para muchos medios los pesos son los balances y hablo de la unidad monetaria. Hoy por hoy los medios impresos mexicanos sobreviven más por la subvención del gobierno que por la publicidad de la iniciativa privada. El político y los gobiernos son como perros que le tienen miedo al periodicazo. Pero cada vez ven con más terror la ola digital que los inunda y destroza carreras políticas a la velocidad de un twit. Son 140 letras, no planas y planas de tinta.
¿Cuál es el peso y balance del internet, de los medio sociales o de las redes sociales? La gente misma, la masa en su conjunto, y la masa es impredecible, implacable y justa. Es lo que hoy llaman y rebautizan como populismo.
La masa pronunciándose por gobiernos populistas, el retorno a la xenophobia, el racismo, el proteccionismo de fronteras, el anti terrorismo. La masa protegiéndose de lo que hoy la amenaza. Las fronteras digitales definiéndose en cada individuo. Ese populismo hoy amenaza a las élites de los consejos editoriales, a los Junco, a los Slim, a los Murdoch. Y su principal herramienta es el Internet.
En el paneo que hace la cámara a los asistentes al discurso de don Alejandro veo animales mediáticos y políticos que están en franca extinción. Guadalupe Loaeza, Carmen Aristegui, Ricardo Anaya, y a Campa Cifrián. Ellos también han sido presa de las mentiras y medias verdades. Han propagado verdades con líneas editoriales para hacer tendencias. O mentiras con sesgo periodístico para hacer temblar a sus adversarios. Alejandro Junco se refirió a ellos, a su consejo editorial, como los soldados de la verdad.
Me dio tristeza no ver a ningún bloggero, a algún youtuber o un twittero. Estoy seguro que ellos no hubieran aplaudido el discurso de don Alejandro, simple y sencillamente hubieran esbozado una mueca de sarcasmo.
Los soldados de la verdad están hoy en el grillo de ocasión de Twitter, en la ama de casa que se queja en su muro de Facebook, en la señora que publica sus zapatos favoritos en Pinterest, en el joven que hace su video en Youtube, en mi hijo que publica en Snapchat. Ellos Sr. Junco son los que cuentan su verdad todos los días y no leen Reforma en su mayoría, ya no les interesa lo que escriben los periodistas, les importa un comino su consejo editorial, no los necesitan para enterarse y divulgar lo que sucede en el mundo, lo que sienten, lo que quieren expresar a quienes los rodean. Lo masivo está ya en la comunicación privada.
Cierra don Alejandro diciendo que sus consejeros han hecho patria con sus ideas y sus colaboraciones. Lamento decirle a don Alejandro que su jardín amurallado es minoría. La patria hoy la construyen de 60 a 70 millones de mexicanos que navegan, comentan, dan share y like en Facebook. Ellos este año hicieron más patria que ustedes, eso puedo asegurárselo.