Lo inimaginable en las campañas rumbo al próximo 6 de junio.
Muchos ciudadanos (mujeres y hombres) hoy se encuentran recorriendo seccionales, distritos, municipios o estados completos, con el objetivo de posicionar un partido, ser el candidato favorito, ganar una elección o reelegirse. Sin duda, cada elección es distinta pero, en esta en especial, estamos viendo lo inimaginable; sí: LO INIMAGINABLE, como se lee.
La mayoría de los candidatos se encuentran inventando sus contenidos para redes sociales, y como buenos mexicanos, la creatividad les sobra.
Así, a continuación enlisto a los candidatos que hasta hoy han sido los más creativos, o, los más ridículos:
-Paquita la del Barrio, después de haber cantado “Rata de dos patas” durante toda su vida, ahora da consejos de cómo sobar la mollera para que no se les caiga a los niños.
-Los luchadores enmascarados ya prometieron que en caso de ganar se quitarán la máscara.
-Samuel ya bailó con su esposa cumbia norteña y pintó bardas; lo extraño es que sabemos que Mariana, su esposa, ni las uñas sola se sabe pintar.
-Yolanda Cantú nos bailó y cantó sus propuestas en Tik ToK al ritmo de algo que aún no le encontramos un género.
-Fernando Garza Martínez puso a mitad de la calle a su equipo de colaboradores hombres a bailar con Tutu.
-Desiree Navarro ya le agradeció en Twitter la nota que le publicó Word Press.
-Elva Aracely está usando la frase en sus portadas de página “Que se le pare a Escobedo”, la cual ha sido tomada ya con albur.
-Víctor Romo ya nos puso a bailar al ritmo de Maluma las acciones realizadas en la Miguel Hidalgo.
-Carlos Mayorga usó una carroza, sí, como se lee (y se vio): una carroza y él dentro de un catafalco, en sus videos, así como un traje anticontagio de Covid-19, para mostrarnos sus propuestas.
Sin duda alguna, muchos candidatos antes de iniciar su campaña se capacitaron o contrataron agencias que manejan comunicación estratégica y neuromarketing en las estrategias digitales; otros, evidentemente, ni se tomaron la molestia, y es a la almohada a la que consultan para saber qué otro ridículo les puede dar rating.
Así, a continuación cito los errores más comunes de los candidatos en las redes sociales:
-“Inflar” cuentas con seguidores que no son reales.
-Publicar cada actividad que realizan en sus redes sociales.
-Usar TikTok sin tener gracia, creatividad o innovación.
-Dejar los comentarios que publican en las redes de sus seguidores sin respuesta.
-No dar lectura e interpretación a las estadísticas.
-Realizar sus diseños o publicidad a través de aplicaciones de internet.
-No contar con un fotógrafo y publicar imágenes mal tomadas.
-Creerse las encuestas que su mismo equipo de campaña o sus bots votan.
-No segmentar la información y los contenidos.
-No subir contenido interesante para sus partidarios o posibles electores.
-Compartir contenido de otras páginas.
Ahora, estos son algunos tips para llevar a cabo las relaciones públicas en las redes sociales:
-Enfocarse en el crecimiento de la audiencia de manera orgánica.
-Responder cada comentario que realizan de forma pública y/o privada en las páginas.
-Realizar preguntas al auditorio, de tal manera que interactúen con el candidato.
-Mencionar todas las redes sociales en los gráficos de campaña.
-Comentar y dar el conocido like a las publicaciones de los seguidores.
-Felicitar en los cumpleaños de manera diaria y personalizada de los seguidores.
Y, estos tips son para realizar comunicación y estrategia en las redes sociales:
-Hacer auditoría de las páginas antes de iniciar campaña.
-Realizar un estudio de marca.
-Elaborar un diagnóstico (FODA).
-Analizar al candidato opositor.
-Identificar al público objetivo.
Analizar los canales de comunicación que se adapten a las necesidades del público objetivo.
-Elaborar un calendario de contenidos.
-Manejar narrativa corta y emocional.
-Dar lectura e interpretación a las estadísticas que arrojan las páginas.
Estos pequeños consejos, que pueden mejorar una estrategia digital, y si no es así, pues lo mejor es que contraten a expertos que hagan que la marca como candidato tenga una presencia real en las redes sociales sin caer en ridiculeces, ya que la reputación y la imagen personal corren un riesgo cuando esta no es manejada de manera profesional.