"No tener cola que le pisen"
Creo se podría predecir sin equivocación que los servidores públicos con más atributos para llegar a la presidencia en 2024 y continuar la admirable labor que lleva a cabo contra viento y marea la 4T, serían Claudia, Tatiana o Marcelo.
Cualquiera de los tres, impulsarían la institución del estado de derecho y conquista de los derechos humanos en nuestro país, que apenas vieron la luz a partir del liderazgo del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien será conocido por instituir la verdadera democracia sin simulaciones.
El disgusto por la personalidad
Cuando esto ocurra, quizá se compruebe finalmente, que la animadversión, la paranoia de rechazo al presidente López Obrador, está basada en el disgusto por su personalidad, por su provenir coloquial, transparente, sencillo pero enérgico y pleno en el ejercicio de sus libertades al no tener cola que le pisen y no, en las políticas de Estado depredadoras que sus opositores le atribuyen desde el ámbito de su mundo virtual que sólo existe en sus cabezas.
Lo digo porque muchos de estos hoy opositores virtuales del gobierno del cambio verdadero, apoyarán entonces seguramente cualquiera de estas tres candidaturas.
Lo interesante es que siendo la labor de regeneración nacional implementada en el servicio público desde el arribo de López Obrador a la presidencia en 2018, aún con sus imperfecciones errores o retos por alcanzar, es una afortunada realidad evidente reconocida dentro y fuera de nuestro territorio, por lo que las largas letanías que constantes vierten dicha animadversión sin ninguna impecabilidad en la palabra, plasmando claramente una frustración personal contra el personaje presidencial 2018/2024, parece habrán de esperar hasta el 2024, para poder liberarse de dichos sentimientos dañinos que traen cargando consigo. Porque, la realidad es que al presidente AMLO esa hiel, no le llega.