Resistencia a la vacunación

El optimismo en torno a la guerra contra el SARS-CoV-2 avanza alrededor de mundo, a pesar de las complejidades médicas y logísticas presentadas por las nuevas variantes y por el alto número de fallecidos. Sin embargo, hoy podemos jactarnos de que hemos superado desde hace algunos días los cien millones de personas vacunadas, lo que rebasa al acumulado de 110 millones de infectados desde la irrupción del virus en Wuhan. Dato halagüeño y simbólico, sin duda.

A pesar de ello, persisten resistencias personales contra la vacunación. Algunos esgrimen el argumento de que las vacunas no son seguras y efectivas, o simplemente, temen introducir una sustancia ajena al cuerpo.

Otros argumentan, por ejemplo, que la completa eficacia de la vacuna de AstraZeneca no ha sido comprobada en adultos mayores de 65 años. Los gobiernos alemán y danés, verbigracia, han recomendado esta fórmula exclusivamente para ser aplicada a los adultos cuyas edades oscilan entre los 18 y los 64 años.

¿Qué ha dicho la Organización Mundial de la Salud sobre este tema?

En un documento publicado el pasado 11 de febrero, la organización sita en Ginebra, Suiza, clarifica el asunto en torno a las especulaciones sobre la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford. En el citado archivo colgado en su página oficial, la OMS asevera que el escepticismo surgió pues no había existido un cohorte significativo de adultos mayores que habían participado en las fases experimentales. Sin embargo -así lo reitera la organización- las personas mayores de 65 años que sí participaron mostraron una respuesta inmunológica similar a los voluntarios de todos los rangos de edad.

Por lo anterior, la OMS, con base en la información que recibe diariamente de los gobiernos en torno a la respuesta a la vacuna británica por parte de los adultos mayores, les recomienda – y exhorta- sin ambages a acudir a los centros de vacunación una vez que hayan sido llamados por la autoridad sanitaria correspondiente.

En el caso de México, el gobierno federal, en coordinación con las administraciones estatales, ha vacunado a más de 1 millón de personas desde el arribo del primer cargamento de la fórmula Pfizer. Esta vacuna fue dirigida principalmente a la inoculación del personal médico que labora en áreas Covid en los hospitales y centros de salud públicos.

Por otro lado, en seguimiento a las recomendaciones citadas, se ha destinado la vacuna AstraZeneca a los adultos mayores. En el caso de la Ciudad de México, los habitantes de las delegaciones Cuajimalpa, Milpa Alta y Magdalena Contreras deberán sentirse afortunados de formar parte de alrededor del 0.8% de la población mexicana vacunada.

Sin miedo a vacunarse

En suma, con el propósito de vencer a la pandemia, y de sacar a México de los últimos lugares en el número de vacunados por cada 100 habitantes (Israel, Emiratos Árabes Unidos, Reino Unido y Estados Unidos llevan la delantera en términos de la aplicación de una sola dosis) debemos convencer a nuestros reticentes adultos mayores de que acudan a la brevedad a vacunarse, con la fórmula que esté disponible al momento de la cita.

No suscribo la idea de que eventualmente habrá una sobreproducción de vacunas. Por el contrario, éstas son escasas, y por ello, muy valiosas.