El divorcio se negoció durante la pandemia
El oligarca norteamericano se habría reunido en múltiples ocasiones con el pedófilo convicto Jeffrey Epstein.
La trama del divorcio de Bill Gates y Melinda se complica aún más, de acuerdo a las revelaciones del portal Axios.
De acuerdo a la investigación del sitio, que retoma reportes del The New York Times, el oligarca Bill Gates habría sostenido varias reuniones con el fallecido pedófilo Jeffrey Epstein, lo cual habría sido una de las razones por las que Melinda habría comenzado a consultar abogados para solicitar el divorcio de su esposo, uno de los hombres más ricos del mundo.
Bill Gates de 65 años y cofundador de Microsoft Corp., es la cuarta persona más rica del mundo.
El caso de Bill Gates, quien al inicio del siglo fuera un personaje repudiado por los constantes abusos y prácticas monopólicas de su empresa Microsoft, es bastante peculiar.
Después de ser sancionado por prácticas anticompetitivas contra empresas como Netscape, Gates se enfocó en la “filantropía”, autoproclamándose “experto” en temas como las energías renovables (cuando sus jets privados y mansiones tienen una huella de carbono que la mayoría de los seres humanos no tendremos jamás en nuestras vidas) y ahora en vacunas, pese a que no es científico, ni médico y de que tiene una carrera universitaria trunca. Aún así los millones que “donó” a la “filantropía” lograron lavarle la cara y le proporcionaron un trato privilegiado en medios y redes sociales.
La supuesta filantropía de la fundación que lleva su nombre habría logrado mejorar la imagen pública de Bill Gates, pero su cercanía con Jeffrey Epstein, que comenzó en 2011, fue lo que habría comenzado a incomodar a su esposa Melinda, quien desde 2013 comenzó a expresar reservas sobre la relación entre ambos personajes
En 2011, Epstein ya había sido convicto por tráfico de personas y otros delitos sexuales que involucraban menores de edad, por lo que no existía realmente ningún motivo para seguir sosteniendo esta relación.
Gates se defendió en 2019 (año en que Melinda Gates comenzó a consultar abogados para su divorcio) señalando que no tuvo ninguna “relación de negocios o amistad con Epstein”, sino que simplemente hablaban de temas de “filantropía” (¿?).
En 2019, Epstein se suicidó, de forma sospechosa y conveniente para personajes como Bill Clinton y el propio Gates, en su celda ubicada en una prisión en Nueva York. Pero su desprestigio y el de los personajes que lo apoyaron y encubrieron continúa.
¿Fue la relación entre Bill Gates y Jeffrey Epstein la gota que derramó el vaso para Melinda? ¿O existe alguna información más grave que podría ser revelada en el futuro sobre el fundador de Microsoft? Ya veremos.