Las bicis

No son baratas, pero sí útiles. Las calificaría de extraordinariamente útiles. Cualquier persona más o menos sana puede, y quizá debe, moverse por las ciudades en bicicletas con ayudas eléctricas.

Me consta, he visto gente con problemas reumatológicos subir sin problemas, en tales bicis, por las calles más empinadas.

No son precisamente baratas, pero su costo es apenas una pequeña fracción de lo que se debe pagar por un coche, inclusive usado.

En todo el mundo –y no son la excepción la Ciudad de México y Monterrey, las urbes que más conozco– hay un auge de comercios que venden bicicletas eléctricas, que además pueden adquirirse fácilmente en Amazon.

Vale la pena regalarlas. Un obsequio así lo agradecerán las personas que lo reciben, ya que mejorarán su figura y su salud; ese regalo también lo agradecerá el medio ambiente de nuestras ciudades.

AMLO, dejar el beis, subir a la bici

El presidente López Obrador no promueve la actividad física con su excesivo apoyo al beisbol, juego en el que los participantes –si no son profesionales o muy dedicados a ese deporte– se mueven mas bien poco.

Ojalá cuando necesite ejercitarse, Andrés Manuel deje los campos de beis y se suba a una bici eléctrica para recorrer la Ciudad de México. Un paseo de dos horas le beneficiará físicamente y, sin duda, lo disfrutará.

Si alguien puede hacerlo es él: tiene a su servicio un eficaz cuerpo de seguridad, ya no el excesivo de otros presidentes, pero sí perfectamente capaz de protegerlo en una ruta ciclista metropolitana.

En Monterrey ya no hay presidente municipal –Adrián de la Garza renunció para buscar ser gobernador de Nuevo León–, así que la petición que haré será a los candidatos que pronto estarán en campaña, sobre todo al favorito Luis Donaldo Colosio Riojas, quien no sabe si buscará el cargo de alcalde por Movimiento Ciudadano, partido que lo ha maltratado; por el PAN, que no ha dejado de invitarlo desde que el partido conservador decidió recurrir a un viejo y popular político, Fernando Larrazabal, necesitado de jóvenes a su lado; o por Morena, para fortalecer las aspiraciones de Clara Luz Flores.

En la Ciudad de México hay jefa de gobierno para rato. En efecto, Claudia Sheinbaum seguirá al frente de la capital del país hasta el 2024 –quizá hasta finales de 2023 si se lanza a la aventura de buscar la presidencia de la república–.

El hecho es que ella mucho puede hacer para ayudar a los vendedores de bicicletas eléctricas. Basta con crear más carriles y hasta calles exclusivas para los ciclistas. Se dice fácil, pero no lo es.

Deben ser vías seguras, es decir, con trampas que impidan el acceso a los coches y, además, Claudia tiene que sacar fondos de alguna parte para exigir a los alcaldes tapar baches en esos carriles y cambiar las rejillas de las alcantarillas porque casi todas las actualmente existentes son peligrosas para la gente que pedalea, en especial para quienes no son expertos en el manejo de la bici.

La Guía ética

Nadie está obligado a estar de acuerdo con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Pero es el presidente de México, y los niños desde muy pequeños lo saben.

La buena educación obliga a enseñar respeto a la figura del gobernante. No se trata de culto a la personalidad de nadie en especial, sino a la idea de que existe la autoridad y de que la convivencia social ordenada y justa exige acatar, críticamente sin duda, lo que desde las instituciones de la administración pública se decida.

La Guía ética para la transformación de México no es un producto para consumo infantil. Pero explicada por los mayores pueden sembrar valores en los niños. Valores civiles: no me parece que solo las autoridades de las distintas iglesias fomenten los comportamientos morales. 

El gobierno civil también debe hacerlo, y otros presidentes no se habían atrevido a dar ese paso. Andrés Manuel lo ha hecho. Convocó a un grupo de gente dedicada a la reflexión e hicieron un trabajo. Los 20 capítulos de la Guía ética son irreprochables:

1. Del respeto a la diferencia <br>2. De la vida <br>3. De la dignidad <br>4. De la libertad <br>5. Del amor <br>6. Del sufrimiento y el placer<br> 7. Del pasado y del futuro<br> 8. De la gratitud <br>9. Del perdón <br>10. De la redención <br>11. De la igualdad <br>12. De la verdad, la palabra y la confianza<br>13. De la fraternidad <br>14. De las leyes y la justicia <br>15. De la autoridad y el poder <br>16. Del trabajo<br>17. De la riqueza y la economía<br>18. De los acuerdos <br>19. De la familia <br>20. De los animales, las plantas y las cosas<br>

Guía ética

Debemos discutir esos temas con los niños, inclusive sin mencionar a Andrés Manuel y a la 4T, aclarando que son los principios del gobierno de México –vale decir, de la idea del gobierno nacional, no del periodo de un presidente en particular–; ello puede ser muy educativo.

¿Que la Guía ética menciona en exceso a la Cuarta Transformación? Es un pecado menor que puede eliminarse simple y sencillamente no mencionando al movimiento de López Obrador al platicar con los chicos.

Creo que no he sugerido con claridad que el regalo a los niños no sea un ejemplar físico de la Guía ética, sino leerla con ellos ignorando lo que el texto pudiera tener de contenido político, esto es, las referencias a la 4T.