Para empezar aclaremos que los perros son hermosos, nobles y la mayoría de las personas tienen un perro de mascota, lo sacan a pasear, le dan de comer, lo bañan, lo cuidan, lo miman, lo tratan como a un miembro más de la familia, entonces ¿Por qué utilizar PERRA como un insulto?
Es un adjetivo calificativo que usan hombres y mujeres para referirse a una mujer sin escrúpulos, sin vergüenza, traidora, sin valores, sin respeto, sin pudor, etc. Es un insulto donde lo único que buscan es decir: prostituta.
Pero, ¿Por qué usar a los inocentes perritos para despotricar en contra de alguien? No lo sé, ni lo sabré jamás. Como en el caso de los hombres, también decimos “ese goey anda de perro conmigo”, “es un perro hijo de su perra madre” (es un suponer, donde hasta la progenitora del susodicho sale a relucir).
El chiste es que siempre utilizamos esta palabra para un insulto cordial y simbólico: hola perra, adiós perro, maldita perra, pinche perra, no me pela la muy perra, perra de mierda; eres una desgraciada perra de 15 chichis, perra del mal, andas de perro, perra ofrecida, perra lambiscona, ¡calmada perra!, ¡quieta perra! y sigue la letanía.
Recuerdan esa frase de “el perro es el mejor amigo del hombre” también la palabra PERRA se usa para manifestar cariños y hasta un toque de amor: “te amo perra”, “eres mi mejor amiga perra”, ¡tú puedes perra!, ¡con todo perra!, ¡vamos perra!, etc.
Sin olvidar que también nos agarramos de otros inocentes animales para usarlos como insulto: maldita zorra, pinche burra, mendiga gata, rata de alcantarilla, eres una maldita víbora, eres tan cerda, pareces pajarraca, mendiga cotorra y bla bla bla. Estas ya son frases que nacen de la confianza entre “best friends”, es un cariñito que se dicen entre sí. Llega a ser algo agradable y exclusivo entre ciertas personas, repito; ante todo la confianza.
Con este escrito espero algo muy sencillo, direccionar el uso de la palabra PERRA para cosas lindas y gratas, extender nuestro vocabulario y modales y tratar de expresarnos de otro modo sin insultar a los perritos ni a ningún animalito de la creación. FIN.