Durante la semana que está iniciando, la comisión de puntos constitucionales de la Cámara de Diputados tiene programada una sesión en la cual discutirá un proyecto de dictamen sobre diversas iniciativas cuyo objeto de modificación es el artículo 65 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; la finalidad de la reforma es lograr una ampliación al lapso de labores de los órganos legislativos federales.

En el presente, los legisladores integran sesiones de trabajo durante dos períodos ordinarios, el primero, por regla general, va del 1o. de septiembre al 15 de diciembre y el segundo, del 1o. de febrero al 30 de abril, lo anterior tiene la excepción relativa a cuando el presidente de la República asume funciones, en cuyo caso, el primer período en vez de iniciar el 1o de septiembre, iniciará el 1o de agosto y puede terminar hasta el 31 de diciembre.

En este sentido, los términos de la propuesta que se sujetará a discusión pretenden establecer un primer periodo ordinario de sesiones, el cual en vez de comenzar el 1 de septiembre, iniciará el 1o de agosto al 15 de diciembre, con la excepción ya explicada con respecto a su conclusión y el inicio de una nueva administración, mientras que, el segundo período, iniciaría el 15 de enero y culminaría el 30 de abril.

En este orden de ideas y de prosperar la reforma, los periodos ordinarios se extenderían 30 días para el caso del primer periodo y 15 para el segundo, en total 45 días más de labores legislativas.

Cabe destacar que la transformación a la disposición constitucional no debería tener inconveniente para procesarse en la comisión, ya que entre las 7 iniciativas sujetas a estudio, cinco son iniciadas por partidos políticos que postularon al actual Presidente de la República, pues hay tres proyectos de modificación redactados por legisladores de MORENA, una del PT y una del PES, además, de entre los 32 legisladores que integran la comisión, 17 son de MORENA, dos del PT y dos del PES, lo que da un total de 21 diputados de un mismo frente contra apenas 11 legisladores de diversas corrientes políticas.

En cualquier caso, es una buena propuesta extender los lapsos de labores ordinarias del Congreso, ya que las razones para mantenerlos tan breves como hasta el momento, atendían a circunstancias que se gestaron en otras épocas y ya no son vigentes, como traslados difíciles por los caminos para llegar a la sede de los “poderes” de la unión o la necesidad de los legisladores de no estar ausentes por tiempo prolongado de los distritos o entidades federativas de las cuales eran representantes , situación que ya no acontece, pues en la actualidad los viajes en aviones o los caminos en autopistas reducen este tipo de problemas.

No obstante lo anterior, los legisladores, preferentemente los de oposición, tanto en comisiones como en su momento, en el Pleno, deben de exponer las razones del por qué sí o por qué no apoyan la propuesta, pues el legislativo es en esencia la despersonalización del poder público, es el contrapeso del ejecutivo, el cual sólo puede conseguir esa finalidad a través del contraste de argumentos poderosos impuestos sobre otros, en este sentido como premisas para el debate debe de considerarse que si bien, es una adecuada idea la de aumentar los tiempos de períodos ordinarios, debe de subirse a la tribuna de la discusión también temas como el por qué se aumenta solamente 45 días y no más, o por qué incluir el aumento de días de los dos periodos ordinarios y por qué no fundar un tercer periodo, entre otros temas, en cualquier caso, este asunto influirá en la vida institucional, política y académica del país.

Yuri Pavón Romero

@lanavajadeockam