Este fin de semana, el portal XALAPADIRECTO.COM, dio a conocer un audio y, que según ellos lo revelan en exclusiva, donde Javier Duarte de Ochoa sostiene una conversación telefónica con Tarek Abdalá Saad, quien fungió como tesorero, en la administración de Duarte. En dicha conversación, se escucha que el ex gobernador lo reprende, por no haber entregado la cantidad de mil millones de pesos al Comité Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI). En la plática telefónica el ex tesorero, le menciona a Duarte, que la encomienda la asignó al ex contralor Iván López Fernández, el cual debía de llevar, a la Ciudad de México en “cajas de huevo” para ser entregadas al Comité Ejecutivo Nacional del PRI.

En el diálogo que entabla Javier Duarte se le oye molesto y preocupado, el cual menciona que le está hablando el CEN del PRI, debido a que acordó con ellos, de enviarles dicho recurso, desde hace dos días y no han recibido nada, dándole la orden directa de hablarle a Iván para que le dijera ¿Dónde está el recurso? Que los mil, no es cualquier chingadera, que podía entender que se tarde, pero no le digan que no llegó. Que sí salieron, de aquí las cajas de huevo, porque si no, le van a querer hacer de chivo los tamales. ¿Qué pasa? que no está pintado, que hablara con Iván, que le estaban echando la mano con las bodegas de le están rentando en el PRI.

Esta  conversación es una prueba detestable y vil, donde demuestra la forma que tenia de operar, el ex gobernador, con sus numerosas artimañas de grandes ligas, sintiéndose totalmente protegido, resguardado, cobijado y solapado, tanto por el Gobierno Federal, así como por su partido el PRI, cuyos líderes fueron en su momento, Manlio Fabio Beltrones Rivera y Enrique Ochoa Reza, los cuales le brindaron todas las condiciones favorables y le otorgaran todo el tiempo, para preparar su fuga,  vaya que fueron buenas comparsas, en el gran saqueo que perpetrado al Estado de Veracruz. Estos personajes políticos están bien embarrados y desprestigiados, pero no solo ellos se vieron favorecidos de este gran robo, también sus colaboradores más cercanos y, la misma familia de Duarte resultaron muy beneficiados.  

Como es el caso de Antonio Tarek Abdala Saad, que ocupó el cargo de Tesorero del Estado, en el año 2012, renunciando a su cargo de tesorero en 2015, para ser postulado candidato del PRI, a Diputado Federal por el Distrito 17 del Estado de Veracruz, con Cabecera en Cosamaluapan, electo a la XLIII LEGISLATURA, actualmente se desempeña como Secretario de la comisión de Economía. Este personaje en su desempeño como tesorero en dicha administración,  fue uno de los operadores en el desvío de recursos por un monto de 23 mil 156 millones de pesos, y con esta estupenda carta de recomendación, de robo y saqueo, la Cámara de Diputados tomó la decisión de congelar, la solicitud de desafuero del diputado priista, Antonio Tarek Abdala Saad, señalado de ser cómplice en el desvío de los mencionados recursos. Los diputados priistas que integran la sección, no se tomaron la molestia en  presentar, el dictamen de desafuero para ser votado, que según ellos no había las condiciones, para sustentar dicha medida. Ante esta resolución, nos pudimos dar cuenta perfectamente, que entre diputados de la misma bancada, se cubren y cubrirán sus fechorías.     

En cuanto a Iván López Fernández, el ex Contralor General del Estado de Veracruz, declaró ante los medios de comunicación en noviembre del 2016, contar con los documentos necesarios, para poder demostrar que durante el gobierno de Duarte, fueron usadas cerca de 600 empresas fantasma para desviar recursos y, que las autoridades tenían conocimiento de dicha situación desde el año 2013. Estamos viviendo un estado de total impunidad, donde los delincuentes gozan de libertad, que el mismo sistema impone, el cual es un verdadero Cinismo.

No cabe duda que la gran clase política mexicana se maneja por intereses y quien otorgue un mayor recurso, ante las grandes cúpulas, gozará de impunidad y privilegios, como también lo es la esposa de Duarte, Karime Macías, que le permitieron escapar del país, con los 41 millones de pesos que desvió del DIF veracruzano, e increíblemente ha sido virtualmente exonerada, aun con las evidencias contundentes de saqueo, en la mencionada institución y demás dependencias del gobierno del Estado, en una clara participación de robo y contubernio con su marido, el ex gobernador. Y así poder tener una vida tranquila y placentera junto con sus tres hijos y, demás familiares en Londres, una vez más, se demostró la presencia de la mano del gobierno federal, en no ser tocada, ni con el pétalo de una rosa, todos estos personajes, formarán parte del basurero de la historia.