Putito, puto, marica; puto el que lo lea.

Nalgas, putos y chichis; jotito el que lo necesita.

Parejas de jotos y ninfas; todos los capacitan.

Así les llaman las putas y todos las necesitan.

 

Su madre fue siempre puta, por eso lo recalcitran;

No obstante, siempre lo dicho, siempre lo martirizan.

 

Sus nalgas no siempre fueron, lo que sus compás le supusieron,

de joven fue siempre hombre; pero de viejo se lo cogieron.

Por eso le dicen puto, porque pocos lo conocieron,

si lo hubieron desconocido, pocos lo se lo cogían.

 

Por eso le dicen puto, pero a veces ni los conoce;

algunas veces es hombre y otra lo desconoce.

Le gusta la vida de hombre, pero siempre se polanquea;

cuando le brincan los hombres también se los potranquea.

 

Nalgas, petacas y putas, son siempre las mañaneras;

no obstante siempre lo puto, a veces lo manoseas.

Leyes, normas y viejas, son siempre sus añoranzas;

lo quiere por ser marica, no obstante ni lo conoce.

 

Así le dicen por puto, por ojete y por culero,

no importa como se piense, siempre se lo ha ganado.

 

Todos sabemos quién eres, lo que hoy no reconoces;

por eso te dicen nene, y juegas con disimulo.

Por eso te dicen puto, por hacerlo y practicarlo;

algunas otras te dicen por habértelo pensado.

 

Ehhhh, puto… el que lo lea.