En México se abandonan anualmente más de 500 mil perros y gatos, por miles de razones, tanto por irresponsabilidad como por ignorancia; el perro es un animal de compañía y trabajo en algunos casos que aparentemente ha ido ganando terreno como ser vivo ante la ley de los humanos para que todo aquel que le haga daño sea sancionado, sin embargo, pareciera que el que existan leyes que los protejan no importa, en los últimos días ha habido casos públicos de maltrato animal en especial a los canes que han provocado indignación.
En Oaxaca una supuesta enfermera del Hospital de Especialidades arrastró por varios metros a su perro amarrado a un coche en movimiento en Santa Cruz Xoxocotlán el pasado 7 de enero, afortunadamente fue videograbada y la Fiscalía General del Estado identificó a la señora, abriendo una carpeta de investigación por maltrato animal, citándola a comparecer este 11 de enero.
También en Oaxaca, el pasado diciembre sacrificaron a Guarumo en Lachigoló, un pitbull que estaba amarrado y que presuntamente mató a una bebé que no se sabe cómo llegó a las fauces de Guarumo, el perro fue llevado a la cárcel y lo tuvieron amarrado del hocico sin comer ni beber agua por dos días, al final fue sacrificado.
Otro caso fue el de “Miguel” el perro de raza bóxer de San Luis Potosí que presuntamente le pusieron un cuete en el hocico, esperaron a que la mecha llegara al final hasta que la explosión le estallara parte de su cabeza, sin embargo existen otras versiones de cómo murió, pero el gran cuestionamiento es qué le pasa a la gente, por qué hacerle esto a un animal.
Y el del perrito que fue apuñalado en Chihuahua, son sólo algunos de los casos registrados en lo que va de este 2019, la crueldad humana se palpa a flor de piel, qué se puede esperar de la gente que no respeta la vida animal, si tienen esos comportamientos contra seres que no pueden hablar, no quiero imaginar que le podrían hacer a un niño, a una mujer embarazada, a una persona de la tercera edad.
El maltrato animal es un tema que ha ido penetrando en diversos sectores de la sociedad, porque se ha generado conciencia sobre su existencia, y sobre todo se han cuestionado muchas conductas en contra de los animales que eran y siguen siendo parte de las tradiciones en muchos hogares mexicanos, como las peleas de gallos, las carreras de caballos, las peleas de perros, el uso de animales de carga y tiro, entre otras.
Actualmente, muchas personas con conciencia animal pelean por los derechos de ellos, pero en qué momento los humanos dejamos a un lado nuestra humanidad y nos comportamos peores que bestias sin sentido, que sólo reaccionan a los estímulos provocados por el olor a sangre y el miedo, los últimos casos de maltrato animal a nivel nacional y en Oaxaca solamente han dejado ver el deterioro social que existe, porque la gente está desquitándose con las mascotas, principalmente de todas sus frustraciones.
Estamos tan acostumbrados a ver ciertos comportamientos como el bullying, como algo natural, pero no sabría cómo denominar a los actos de violencia que ejercen en contra de los animales. ¿Cómo frenar la violencia contra las mascotas?, es una pregunta muy difícil de contestar, aunque ya se han modificado las leyes y ya es reconocido como delito el cometer estos actos contra seres vivos irracionales falta mucho para poder tener una sociedad sana.
No existe un censo oficial de perros en México, pero el INEGI publicó que 57 de cada 100 personas tiene una mascota en México, y que el 89% tiene perro, o sea que más de 62 millones de mexicanos tienen un perro, y urge frenar el maltrato animal.
Hace falta mucho en el quehacer de la concientización del respeto hacia los animales, pero también hay que impulsar políticas públicas para que haya un control de natalidad de perros, se deben hacer más campañas de esterilización masivas, hay millones de perros en la calle y a esos hay que castrar también, para que dejen de reproducirse.
Aunque también sería una buena medida realizar castraciones físicas a los que maltraten a los animales, niños y mujeres, quizá estas personas no deberían replicar su ADN predispuesto a la violencia, evitar su reproducción, sería tan bueno como llevar un censo oficial de perros.
@fuaper