Siempre es grato constatar que personas inteligentes se detienen a leer una columna mía, le encuentran agujeros, se hacen preguntas y deciden tomarse el tiempo de escribir al respecto.
No hay recompensa mayor en este mundo del periodismo, lo aseguro, y es mucho mayor este gozo que el dolor infligido por las descalificaciones personales que vengan incluidas.
Por eso le respondo a Jane de la Selva, a quien agradezco la deferencia. Dice mi amable interlocutora que en este artículo no explico bien por qué Morena no es de izquierda y que luzco confundida al considerar que el PRD sí lo es.
Dice Jane en su columna para SDPnoticias:
“Pareciera su texto más que ingenuo o mala leche, realmente ignorante de la historia reciente del PRD a partir del 2006. Pasó en blanco la mujer y queda reprobada en la materia al expresar que el PRD es el “único partido serio de izquierda”. Será universitaria periodista o comunicadora—egresada de ciencias políticas seguro que no-- pero hasta una salvajita cualquiera como su servidora, sabe que el PRD hace rato que ha ido defraudando a la democracia, que ha demostrado con hechos ser un partido vendido al régimen; harta alharaca en el congreso pero siempre se ponen de acuerdo tras bambalinas como lo hace su hermano mayor el PAN”.
Con eso arranca. Con un argumento ad hominem que busca diplomas en mi pared para ver si esos refuerzan mis argumentos. Le informo que sí soy politóloga, que mi mentor académico es trotskista, el politólogo mexicano que mejor ha escrito sobre izquierdas (en plural) y derechas (en plural) en el mundo, pero que eso no tiene nada qué ver porque es posible que yo no haya entendido nada en mi paso, hace ya más de 20 años, por las aulas universitarias, pero sobre todo porque conozco a periodistas, poetas y hasta abogados que entienden más de esto que muchos colegas que también cuentan con diploma de mi Facultad.
En el fondo, lo que quiere decir Jane, y tiene razón, es que escribo sin poner por delante mi estatura académica. No se lo discuto, primero porque no tengo estatura académica y segundo porque se me ha pasado la mano. He dicho barbaridades sobre la Iglesia católica y tengo ensayos sobre sexo, me he atrevido a publicar sobre literatura y hasta de matemáticas he escrito algo. Un horror. Le confieso que no me alcanzan las credenciales.
Pero atiendo a sus preguntas, que son válidas: ¿por qué digo que Morena no es de izquierda? Lo escribí ya en la columna: porque no habla del papel del Estado en la rectoría económica, la distribución de los recursos o la forma de combatir la desigualdad.
La confusión es habitual: las posturas contra el régimen son vistas como posturas de izquierda porque la izquierda, la mayoría de las veces, es una postura anti status quo, y así nació. Pero ojo, hoy se puede ser anti status quo y no ser de izquierda: para muestra bastan Le Pen y la oposición venezolana. En México, Morena es el único partido que combate al status quo (“un régimen de opresión, corrupción y privilegios”, le llama), pero no lo hace desde la izquierda, sino con énfasis en la honestidad política. El primero de sus principios dice: “El cambio verdadero del país comienza por cambiar la forma tradicional de intervenir en los asuntos públicos”.
El PAN también combatía el status quo, en sus orígenes, y lo hacía poniendo atención primordial a la democracia. Esa bandera se convertiría después en el imperativo de la izquierda mexicana, pero ni la democracia ni la honestidad ni el combate al status quo definen a la izquierda. Lo que lo hace es su visión sobre el papel del Estado y los medios de producción como ejes para combatir la desigualdad.
Hay una parte de su texto que me encanta:
“¿De dónde lo sacó o en qué hechos se basa? Caray me sonó idéntica a los jalisquillos de mi familia”.
Me encanta por lo de los jalisquillos. ¡A mucha honra!, gracias Jane. Pero a la pregunta te respondo: lo saqué de los principios, que son, como dices, el comienzo. Sí, pero también son un documento. Y aquí está, lo comparto. Lo he discutido ya con amigos politólogos –ellos sí buenos y activos en la academia- y con buenos amigos de Morena, de esos que sí han leído a Piketty.
Puedo estar equivocada en lo que ahora voy a escribir, porque es una apreciación, algo sobre tu subtexto. Me parece que lees un juicio negativo de mi parte hacia la ideología de Morena. Te aseguro que no es así. Yo misma no soy de izquierda. En todo caso, al que cuestiono es al PRD, que olvidó lo que lo hizo ser. Dices que paso por alto lo que ha sido este partido y su complicidad con el régimen. Supongo que entonces escribí algo muy mal porque precisamente estoy pidiendo que alguien recuerde lo que era esa institución antes de que se convirtiera en la desgracia que hoy es. (Claro, ahora lo veo, gracias. Debí haber puesto “es el único partido con principios sólidos de izquierda”, para distinguir entre sus planteamientos ideológicos y su práctica). Y por qué lo hice? Porque soy de izquierda y quiero al PRD? No, por la pura pluralidad. No necesito estar de acuerdo con el PRD (el que fue) para reconocer la fuerza que les daba esa construcción ideológica y las ventajas que eso daba a nuestro sistema de partidos.
Me extendí un poco, perdona. Te agradezco nuevamente la deferencia y espero que tengamos más intercambios, me encanta.